GRANADA, 14 Abr. (EUROPA PRESS) -
El titular del Juzgado de Instrucción 3 de la Audiencia Nacional, Fernando Grande-Marlaska, abogó hoy por una reforma que permita "limitar" el secreto de sumario "a lo imprescindible" y, por otra parte, que los jueces puedan, en casos concretos, "prohibir" a los medios de comunicación publicar determinada información relacionada con actos de terrorismo, asesinatos o corrupción por un corto espacio de tiempo, de unos diez a quince días.
Durante las jornadas 'Comunicación y Justicia', que se celebran desde ayer en Granada, el magistrado consideró que la limitación del secreto de sumario deberá conllevar una "exigencia de motivación absoluta", y "justificar" la razón por la que se limita, y recordó que el que actualmente contempla la ley sólo se refiere al secreto de las actuaciones, y no de los hechos.
Grande-Marlaska se refirió al hecho de que el levantamiento del secreto de las actuaciones a las partes del proceso implicadas conlleva que los medios de comunicación puedan acceder a esa información, como ha sucedido en el denominado 'caso Gürtel', en el que los 50.000 folios resultado de la investigación han sido publicados, incluyendo además las intervenciones telefónicas practicadas.
El instructor del caso podría haber emitido, a entender de Grande-Marlaska, un auto prohibiendo la publicación, "pero no lo ha hecho" porque "la realidad es bien distinta" y los jueces, señaló el magistrado, "somos conscientes de que muchas resoluciones judiciales tienen su interés y la gente tiene derecho a conocerlas siempre que no se perturbe el desarrollo de la instrucción".
Además, según apuntó, el hecho de que sea el propio órgano judicial el que informe permitirá una serie de "garantías" y sirva de "control", puesto que supondrá que sea "mucho más fácil evitar las interpretaciones indebidas de la actuación judicial".
Con respecto a la prohibición de publicar determinadas informaciones, Grande-Marlaska insistió en que, hoy por hoy "no existen mecanismos", "se podría plantear" una reforma para "cuestiones muy concretas" relacionadas con la protección de las víctimas, los imputados o para garantizar la prueba.
Para el magistrado, el propio Tribunal Constitucional ya contempló en dos sentencias de los años 80 esa posibilidad de una forma velada, y otros países como Austria, Portugal o Inglaterra ya lo llevan a cabo, aunque este último conllevando un delito de "desacato a la corte", del que no es partidario el magistrado de la Audiencia Nacional.
El juez puso como ejemplo el caso de la joven sevillana Marta del Castillo y consideró que "igual hubiese sido positivo" que se hubiera evitado el "circo mediático" de los primeros días de la investigación para que "ni lo imputados se sintieran protagonistas".