MADRID 1 May. (EUROPA PRESS) -
Guatemala, que con 5.000 muertes violentas es el tercer país con mayor número de homicidios del mundo, cuenta desde ayer con una nueva ley de control de armas que prevé hasta 15 años de cárcel para los que la violen, según informaron los medios de comunicación locales.
Aprobada en el parlamento el pasado 31 de marzo, la nueva ley endurece las condiciones para conseguir el permiso de armas, entre las que destaca la obligación de someterse a exámenes psiquiátricos y a pruebas de tiro. La ley también limita el número de armas y municiones permitidas a cada ciudadano (antes ahora la compra era libre) e incrementa las sanciones por tenencia ilegal.
La ley regula la tenencia, posesión, importación, exportación, fabricación, comercialización, donación, traslado, compraventa, almacenaje, desalmacenaje, transporte y tráfico de armas y municiones. En total, el nuevo texto establece hasta 37 delitos, entre los que destaca la fabricación de armas artesanales ('hechizas') como las que utilizan fundamentalmente los pandilleros o los miembros de las 'maras', bandas criminales juveniles muy comunes en toda Centroamérica.
Los parlamentarios y responsables gubernamentales serán los únicos exentos de la obligación de pedir permiso de armas, pero deberán registrar sus armas ante el organismo responsable, la DIGECAM.
Según la agencia misionera de noticias MISNA, el aumento de la pobreza, que afecta hoy al 51 por ciento de los 13,3 millones de guatemaltecos, y la infiltración criminal en las instituciones estatales son los factores que más han contribuido al desarrollo del crimen organizado. Guatemala registra un promedio de 5.000 muertes violentas al año, lo que constituye el tercer índice de homicidios más alto del mundo.