El hombre que presuntamente fue acuchillado por su cuñado en Medina del Campo exculpa a éste y acusa a su esposa

Actualizado: martes, 20 febrero 2007 15:39

Su testimonio provocó una gran sorpresa, ya que desde hace tres años la víctima sostenía que el acusado fue el autor material

VALLADOLID, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia de Valladolid fue hoy escenario de un hecho más propio de una película del género judicial que de una jornada típica de las que habitualmente se viven en dicha Sala, cuando la víctima de un acuchillamiento registrado en febrero de 2004, el colombiano Robinson C.V, quien hasta la fecha había incriminado directamente de sus lesiones a su cuñado Miguel Angel M.B, exculpó al acusado de cualquier responsabilidad y, para sorpresa de todos, aseguró que su esposa y hermana del anterior, María del Mar, fue la persona que el día de autos le agredió con un cuchillo de 20 centímetros de hoja.

Ella y otro hermano llamado Benito ya fueron juzgados por estos mismos hechos en 2006 y condenados por la Audiencia vallisoletana a penas de 3,3 años de cárcel por delito de lesiones con uso de instrumento peligroso y tentativa de detención ilegal, con la agravante de parentesco, la primera en calidad de inductora y el segundo como cómplice, si bien Miguel Angel, hermano de los anteriores y supuesto autor material del acuchillamiento, no pudo ser juzgado entonces porque desde el día de la agresión permaneció fugado durante casi tres años.

En este segundo juicio, la víctima de las lesiones, nada más comparecer en Sala y antes de ser interrogado, pidió al magistrado presidente la oportunidad para desdecirse de lo mantenido en el proceso judicial anterior al objeto de clamar ahora por la inocencia de Miguel Angel M.B, el hombre que tenía frente a sí y que ocupaba el banquillo de los acusados. "Lo hizo mi esposa, aunque acusé a mi cuñado porque nos llevábamos mal y quería joderlo", explicó el lesionado, quien atribuyó la animadversión que sentía por el acusado al hecho de que éste hubiera rehusado ejercer de padrino en su boda.

DILIGENCIAS POR FALSO TESTIMONIO

"María del Mar fue la causante de todo, pero como ahora está detenido Miguel Angel yo no quiero que éste pague por algo que no ha hecho, no puedo permitirlo porque ni siquiera estuvo allí. Cuando el acusé estaba tomado", insistió el colombiano, que, en medio de la sorpresa y murmullos de los allí presentes, no quiso dar marcha atrás a su nueva versión de los hechos pese a la advertencia del Ministerio Fiscal de pedir a la Sala que iniciara acciones contra él por delito de falso testimonio.

El lesionado, en declaraciones recogidas por Europa Press, relató, ante la mirada incrédula de la fiscal, que los hechos se produjeron en la madrugada del día 15 de febrero de 2004 cuando en el camino de regreso con su esposa a Madrid, tras haber pasado ambos el día en Palencia, María del Mar recibió una llamada al móvil que a él le provocó un gran enfado pues pensaba que ella le estaba engañando con otro.

Fue entonces cuando Robinsón, harto de la situación, se apeó del coche tras discutir con su esposa y dejó que ésta siguiera su camino. Minutos después, al encontrarse el peatón abandonado a su suerte de madrugada y en plena carretera, a la altura del kilómetro 169 de la N-VI, dentro del término de Medina del Campo, optó por llamar de nuevo a su mujer para que volviera a recogerle, si bien de regreso María del Mar iba ya provista de un cuchillo con el que le causó lesiones en la cabeza, la espalda y una mano.

El testigo añadió que apareció entonces un hermano de su esposa, Benito, a quien ella había pedido ayuda por teléfono, y entre ambos trataron de meterle en el maletero de un Toyota Supra propiedad de su cuñado con el fin de tirarle luego al río, objeto que finalmente no lograron ya que el lesionado pudo salir del habitáculo y echar a correr para luego pedir ayuda a la Guardia Civil con su móvil.

"EN EL MALETERO NO CABE NI UN BOCADILLO"

Por su parte, el acusado, para quien inicialmente la acusación pública pide siete años de cárcel, mantuvo que la noche en que se produjeron los hechos se encontraba durmiendo en su casa, sita en la calle Soto, en el barrio de La Rondilla, y, por ello, negó con rotundidad que hubiera acudido en auxilio de su hermana en compañía de Benito y mucho menos que tras encontrar en la carretera al matrimonio hubiera corrido tras su cuñado armado con un cuchillo de grandes dimensiones y le asestara varias cuchilladas.

"No puede ser porque yo no estuve allí", insistió el procesado, quien expresó igualmente sus dudas de que Robinson hubiera sido introducido en el maletero del Toyota Supra de Benito, "sobre todo porque era tan pequeño que en él no cabe ni un bocadillo".

Su hermana María del Mar compareció igualmente en el juicio pero se acogió a su derecho de no declarar, mientras que Benito, condenado al igual que la anterior por estos mismos hechos el pasado año, mantuvo la versión de Miguel Angel y aseguró desconocer quién pudo agredir a Robinson. "¡Se lesionaría él solo!", dijo con ironía Benito, quien aseguró que cuando el día de los hechos llegó al encuentro de su hermana no apreció que su cuñado se encontrara herido.

El ya condenado por estos hechos como cómplice definió a Robinson como un hombre "peligroso"--se encuentra preso por tráfico de drogas--que manejaba mucho dinero, utilizaba armas normalmente y, además, "se jactaba de la facilidad que tenía para conseguirlas", de ahí que acudiera presto en auxilio de su hermana cuando ésta le llamó aquella noche por teléfono y le dijo que su marido la había amenazado de muerte.

También declararon distintos guardias civiles que socorrieron a Robinson en plena carretera y luego le interrogaron en el Hospital de Medina del Campo, donde, pese a encontrarse aturdido aún por las heridas, acusó entonces a Miguel Angel como autor material de las cuchilladas recibidas, versión que, en opinión de la fiscal, es la real y no la ofrecida hoy en el juicio.