Ibarretxe dice que los pueblos pueden hacer mucho por Europa y que no hay que tener "miedo" a la libre adhesión

Actualizado: lunes, 20 febrero 2006 15:32

Cree que Europa no cuenta aún con personalidad propia y dice que mantiene un "déficit enorme de cercanía" a los ciudadanos

BILBAO, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -

El lehendakari, Juan José Ibarretxe, expresó hoy su convencimiento de que la identidad de los pueblos, como el vasco, puede hacer mucho por Europa y agregó que no se debe tener "miedo" a que el proyecto europeo se consolide sobre la base de la libre adhesión. Además, dijo que la UE será más fuerte si se arbitran mecanismos de participación que puedan consolidar el proceso, aunque consideró que aún no cuenta con "personalidad propia" y mantiene un "déficit enorme de cercanía" hacia los ciudadanos.

Ibarretxe trasladó estas reflexiones durante la clausura de la jornadas sobre "Diálogo social y las tendencias de futuro en la UE" celebradas durante la mañana de hoy en Bilbao y donde el jefe del Ejecutivo autónomo destacó el papel de los pueblos como aliados en la construcción de Europa porque, "se quiera o no, los pueblos formamos parte de esa red de redes que va más allá de las diplomacias y mecanismos de relación de los Estados".

Sin embargo, consideró que los diferentes pueblos requieren del reconocimiento de un nuevo papel "que debe ser creciente en la medida en que así lo vayamos reivindicando desde los diferentes lugares, en este caso desde el pueblo vasco".

A su juicio, la identidad favorece el nuevo concepto de competir y cooperar porque permite "alianzas estratégicas y creo que cada vez es más importante configurar espacios desde los que se puedan hacer cooperaciones estratégicas en términos de alianza, aunque denunció que en la actualidad Europa traslada un "déficit enorme de cercanía". "Lo digo sobre la legitimidad que tiene ser un pueblo de Europa que ha votado sí en todos sus territorios: en la Comunidad Autónoma Vasca, sí en Navarra, y en el País Vasco-francés", argumentó.

Tras considerar que no fue una "buena idea" retirar el concepto de los pueblos del artículo 1 del Tratado Constitucional dijo que "estamos a tiempo de corregir esos errores" y abogó por preguntarse si el hecho de "construir desde el poder" incide en la implicación de la ciudadanía en el proyecto europeo.

Según dijo, "el papel y el concepto de la identidad de los pueblos puede hacer muchísimo, sin quitar nada a nadie". "No tenemos que negar el papel de los Estados, el papel creciente de las ciudades y, a partir de ahí, ver de qué manera empujamos todos en la misma dirección y ver de qué forma el respeto a la identidad de los pueblos puede ayudar a consolidar ese modelo desde un punto de vista democrático y no debemos tener miedo a que Europa se consolide sobre la base de la libre adhesión de los diferentes pueblos, Estados, naciones o ciudades que lo componen", explicó.

En todo caso, el lehendakari se mostró optimista en relación al proyecto europeo aunque trasladó su tristeza porque siempre "haya sido la economía la que haya tirado el proyecto europeo" ya que "me gustaría que fuéramos capaces de avanzar en el proceso de construcción europea más en términos de ilusión que por necesidad, entre otras cosas, porque asumir el proyecto como un mal inevitable no es el mejor de los compañeros de viaje para hacer de ese proyecto una ilusión colectiva".

Según dijo, es difícil ilusionar a la ciudadanía sobre un proyecto que es necesario como Europa "si al mismo tiempo le acusamos de ser el causante de todo tipo de males" y agregó que, "pese a las fallas, sigue siendo un proyecto que necesitamos y en el que el pueblo vasco tiene depositadas todas nuestras ilusiones porque creemos en esa Europa de adhesión".

Para Ibarretxe, Europa será más fuerte si se arbitran "mecanismos de participación que nos permitan consolidar el proyecto". "Creemos --añadió-- que nuestro modelo de relación con el Estado y con la UE también se hará más fuerte si lo hacemos sobre la base de mecanismos de participación que nos permitan voluntariamente pertenecer y desarrollar estos proyectos desde la base".

AIRES EUROPEOS

El lehendakari aseveró que Euskadi, en todo caso, ha "respirado siempre los aires europeos" porque "siempre hemos creído en este proyecto, estamos enamorados de la idea de Europa incluso antes de que la propia Europa institucionalmente comenzara a trabajar".

Asimismo, dijo que, respecto al proyecto europeo, queda aún pendiente "desarrollar Europa desde una respuesta potente a los derechos individuales y colectivos y el gran desafío que hoy tenemos instituciones públicas y privadas es si responder construyendo-- como hasta ahora hemos hecho-- desde el poder, o desde la respuesta colectiva e individual de los hombres y mujeres".

Tras destacar el papel importante que puede ocupar Europa, destacó la necesidad de "hacer ver al mundo que es perfectamente posible asumir el mercado y que no nos tiemblen las rodillas y sin dejar de mirar a los ojos al mercado, tener la capacidad de mirar también a los ojos a las personas".

Por último, dijo que desde Euskadi se hace crítica al proyecto Europeo para mejorarlo pero nunca para negarlo porque "nuestro futuro está directamente asociado a la existencia de un proyecto de Europa sano" pero, desde el punto de vista de la construcción política, "es evidente que Europa no ha sabido resolver todavía con acierto, como tampoco el Estado español y como estamos también pendientes de resolverlo en nuestra relación entre Euskadi y España, los mecanismos de participación y de decisiones democráticas".

"Tenemos mucho por hacer, dar con mecanismos de participación globalmente de la ciudadanía y de los diferentes colectivos y hay que dar una dimensión exterior del proyecto europeo con personalidad propia que aún no tenemos. Hicimos el ridículo en la Guerra del Golfo, y en la guerra de los Balcanes y hoy todavía no tenemos una personalidad propia porque no sabemos muy bien que corpus es el que hay detrás de Europa", concluyó.