BILBAO, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente del EBB del PNV, Josu Jon Imaz, consideró hoy necesario que se marque "una distancia temporal" entre la negociación ETA-Estado y la creación de la mesa de partidos. Además, señaló que no se puede hablar de sacar a los presos de las cárceles, mientras la violencia "no forme parte del pasado" y reclamó que el lehendakari, Juan José Ibarretxe, tenga "un papel" en el foro multipartito que se cree, aunque señaló que esto no puede condicionar el diálogo político.
En una entrevista concedida a Europa Press, Imaz afirmó que se iniciará un proceso de paz en el momento en el que haya "una decisión clara y nítida por parte de ETA de parar cualquier tipo de actividad violenta, bromas, amenazas o extorsión". A su juicio, tal como dice la resolución del Congreso, el Gobierno abordará un final dialogado de la violencia cuando la banda armada "dé señales inequívocas" de que quiere abandonar las armas.
Tras reiterar que debe haber una diferenciación entre el diálogo de la organización terrorista con el Gobierno y la negociación de los partidos, consideró que también se debe marcar "una distancia temporal" entre el diálogo ETA-Estado y la creación de la mesa de partidos.
Para el líder jeltzale, "hay suficientes elementos de enganche" en los documentos de su partido, del PSE-EE y el de Anoeta como para que "se pueda ir trabajando una posición acordada sobre la metodología que tiene que tener" el foro multipartito para "una negociación política en Euskadi".
No obstante, advirtió a ETA de que, "mientras exista extorsión a las personas de este país para tratar de sacarles dinero y hacer tajada, el PNV entenderá que no se cumplen las condiciones para un final dialogado".
"Si la paz tiene que venir, desde luego, nosotros empujaremos para que venga, pero tendrá que ser paz para todos, para los concejales, para los ertzainas, para los periodistas y para los empresarios porque, si no, ?de qué estaríamos hablando?", preguntó.
AUTODETERMINACION
Tras mostrarse de acuerdo con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en que "no hay que negociar con ETA la autodeterminación" ni ninguna otra cuestión política, rechazó adelantar si el derecho a decidir se abordará en la mesa de partidos.
"El PNV tiene muy claro que la voluntad y la decisión de la sociedad vasca tiene que ser respetada y que es un principio democrático, pero no es algo que se tenga que negociar con ETA", insistió.
Josu Jon Imaz subrayó que, con la banda armada, sólo se podrá negociar sobre asuntos como "el futuro de sus activistas" y su desarme.
PRESOS
Además, afirmó que no se puede hablar de que los presos salgan a la calle, cuando la organización terrorista "no ha abandonado definitivamente la violencia", en referencia a la insistencia de Batasuna para que los reclusos de ETA abandonen las cárceles en la negociación con el Estado.
A su juicio, una vez que la banda armada abandone las armas, "en el diálogo habrá que hablar de muchas cosas, pero no hay que confundir el orden de los factores que, en este caso, sí tienen mucha importancia".
"Cuando la violencia de ETA forme parte del pasado, vamos a tener que avanzar un camino en política penitenciaria y en otro tipo de temas que afecten a ETA, como entrega de armas o reconomicimiento de la víctimas, que van a ser procesos complejos porque son temas que afectan y hieren de forma profunda sentimientos", señaló.
Además, consideró que "habrá que dar cada paso analizando que hay personas que han sufrido en carne propia ese terrorismo, habrá que escucharlas y tomar decisiones que, en algunos casos, pueden ser aceptadas y en otras pueden ser dolorosas para estos colectivos". Sin embargo, recordó que, "de momento, las armas están vivas, y ETA sigue extorsionando, amenazando y atacando".
IBARRETXE
Sobre las afirmaciones de Batasuna de que tendrá que designarse a una persona que presida la mesa de partidos y que sea "ajena al conflicto", Imaz señaló que Juan José Ibarretxe tendrá que tener "un papel" porque "el lehendakari no es una cosa cualquiera y el Gobierno vasco es la institución que los ciudadanos vascos han decidido que nos dirija".
"El PNV sí cree que tiene que tener un papel que jugar en este proceso, pero, conociendo al lehendakari e incluso desde nuestra propia posición como partido, creemos que éstos no tienen que ser los aspectos insalvables de un diálogo político y de una negociación de partidos", agregó.
Para el presidente del EBB, "no se trata de ver quién protagoniza el proceso, quién lo dirige o no", sino de "acordar las bases y una reglamentación entre todos". Además, pidió a los socialistas "respeto" para el lehendakari, a quien el PSE-EE calificó "de rémora" para el consenso entre partidos por acusarles de poner "vetos" al pedir "acuerdos transversales".
Por su parte, el líder jeltzale se mostró de acuerdo con los socialistas en que las formaciones políticas deben alcanzar acuerdos que incluyan "a las diferentes sensibilidades políticas que vivimos en este país", y recordó que es algo que hasta Batasuna está reclamando.