Inmigración.- Chaves afirma que el mercado laboral "tiene límites y no puede absorber a todos los que llegan a España"

SEVILLA 18 Sep. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, advirtió hoy de que el mercado laboral español "tiene límites y no puede absorber a todos los inmigrantes que llegan a España", por lo que defendió la necesidad de acoger únicamente a los inmigrantes que "puedan contar con un trabajo digno, con buenas condiciones y nada más".

En declaraciones a TVE recogidas por Europa Press, Chaves aseguró que "la inmigración es un fenómeno universal, efecto de la globalización, que requiere una solución global" y se mostró convencido de que "si todos los países de la UE no se implican en el desarrollo económico de los países de origen, no habrá solución en muchos años".

Tras poner de manifiesto que "el aspecto trágico de la inmigración en España se centra en los cayucos en Canarias y las pateras en Andalucía, pero a través de ellas sólo entra en España uno de cada 20 inmigrantes", el jefe del Ejecutivo andaluz apostó en primer lugar por reforzar la cooperación con los países de origen, algo en lo que reconoció que "la UE hasta ahora no se ha implicado y estamos presionando para que se implique".

Junto a ello, Chaves abogó por impulsar una "política diplomática de acuerdo con los países de origen para que impidan la salida de los emigrantes" y por regular el acceso al mercado laboral de aquellos inmigrantes a los que "pueda acoger con un trabajo digno, con buenas condiciones y nada más", ya que indicó que "lo que no puede hacer es entrar más gente de lo que el mercado laboral español puede absorber".

"EFECTO SALIDA" Y NO "EFECTO LLAMADA"

"Tenemos que impedir la inmigración ilegal y si se produce tenemos que hacer todo lo posible por repatriarlos con todas las garantías jurídicas; es difícil, pero hay que hacerlo", subrayó el presidente de la Junta, que afirmó que no existe "efecto llamada", sino "efecto salida" de "millones de seres en los países africanos que están en la miseria y corren el riesgo de perder su vida para ir a Europa para buscar una salida más digna que la que tienen sus propios países".

Preguntado por si el Gobierno cometió un error con el proceso de regularización del pasado año, Chaves puso de manifiesto que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero "se encontró con 800.000 inmigrantes ilegales de la etapa del Gobierno de Aznar que estaban trabajando en la economía sumergida y estaban en una situación de explotación".

Tras subrayar la importancia de poner en valor los "aspectos positivos" de la inmigración como su contribución a las cotizaciones de la Seguridad Social, el presidente andaluz reiteró que "el mercado laboral español tiene unos límites y no puede absorber a tanta gente como llegan a España", aunque dejó claro que ello no impide desarrollar una "política de integración razonable".

"Es evidente que si no quiere crear un caos en el mercado laboral ni fomentar el papel de las mafias, hay que controlar el flujo migratorio", indicó Manuel Chaves, que defendió que el Gobierno central está "actuando correctamente" en materia de inmigración y expresó su "esperanza en que las políticas del Gobierno en relación con Mauritania y Senegal den resultado a medio plazo".