Investidura.- Montilla aboga por la posición "decisiva" de Cataluña en El Prat y el traspaso de Cercanías de Renfe

BARCELONA, 23 Nov. (EUROPA PRESS) -

El primer secretario del PSC y futuro presidente de la Generalitat, José Montilla, desgranó hoy las principales medidas en materia económica y de infraestructuras que llevará a cabo su gobierno de Entesa Nacional pel Progrés, señalando como prioridades la creación del consorcio de gestión del aeropuerto de El Prat (Barcelona) y el traspaso de la gestión de la red de Cercanías de Renfe.

Montilla apostó por "una posición decisiva" de la Generalitat en la gestión del aeródromo de Barcelona, con la aprobación de la norma singular que encomiende la gestión del aeropuerto de Barcelona "a un consorcio formado por la Generalitat, la administración del Estado y la administración local, con la participación también de la iniciativa privada", siguiendo el modelo que está funcionando en muchos países europeos".

Así, se comprometió a desplegar las competencias y el sistema de financiación pactado en el Estatut "asumiendo la gestión de cercanías y regionales" y se propuso "incrementar la fiabilidad del servicio de cercanías, tanto de la red de Renfe como de Ferrocarrils de la Generalitat, hasta convertirlos en verdaderos metros regionales".

También anunció "medidas para mejorar las infraestructuras y servicios de transporte en las comarcas de montaña" así como la eliminación de los peajes en los tramos con funciones de circunvalación y en los más antiguos, con la creación de "un fondo de rescate y homogeneización de peajes".

ELUDE HABLAR DE LA MAT Y DEL CUARTO CINTURÓN.

Montilla eludió, en cambio, hablar del proyecto del Cuarto Cinturón, que su partido defiende en contra de sus socios de ERC e ICV-EUiA, y tampoco fue preciso respecto a la construcción de la línea de muy alta tensión (MAT) de interconexión con Francia, de la que se limitó a asegurar que "garantizaremos un suministro eléctrico de calidad".

El futuro presidente catalán anunció una política económica "de apoyo al sector empresarial", con un impulso especial de la I+D, garantizando a su vez un "desarrollo sostenible" y respetuoso con el medio ambiente.

La transparencia en el gasto público, con una nueva Ley de las Finanzas Públicas, y una política industrial de apoyo a las empresas y sectores "que no tengan viabilidad a largo plazo" para reorientarlas hacia sectores con más futuro son otras de las líneas maestras del programa económico expuesto por Montilla.

En este sentido, se refirió a las deslocalizaciones al comprometerse a establecer "un programa de actuaciones en caso de cierre empresarial, que contemple entre otros el plan social de la empresa hacia los trabajadores y el territorio, y que tenga en cuenta las ayudas públicas recibidas por la empresa".

En el ámbito de las infraestructuras, Montilla se propuso "integrar en el Plan de Infraestructuras del Transporte de Cataluña la parte terrestre, de red viaria y ferroviaria, el Plan de Transportes y el Plan de Infraestructuras del Transporte aéreo". En este área, anunció un Plan de Puertos que prevé un "especial énfasis en la protección del litoral y en la regeneración y estabilidad de las playas degradadas".

La sostenibilidad ecológica tuvo también un papel destacado en el discurso de Montilla, quien anunció su intención de impulsar "un pacto para la modernización ecológica" de Catalunya que involucre a "los agentes sociales y económicos", además de la adecuación de la Ley de Intervención Integral de la Administración Ambiental a las normativas europeas.

La aprobación de la Ley de protección de la Biodiversidad; la dotación de recursos a la Red Natura 2000 que "dinamice la actividad económica" de las zonas protegidas compatibilizándola con los "objetivos ambientales"; un Plan Sectorial de Infraestructuras de Residuos Municipales; un programa de reutilización y un programa de implantación del riego eficiente en el campo catalán, fueron otras de las medidas anunciadas por Montilla en este campo.

En materia de energía, apostó por "impulsar una estrategia de ahorro y eficiencia" y se comprometió a "fomentar las energías renovables" con un Plan específico "que multiplicará por siete la cantidad de energía eólica producida", anunció. El presidenciable se comprometió a alcanzar "una participación de las energías renovables del 11% en el año 2015".

DESPLEGAR EL ESTATUT.

Montilla apostó también por desplegar los preceptos económicos establecidos en el nuevo Estatut, empezando por el capítulo de financiación, con la creación de la Agencia Tributaria Catalana y el consorcio con la Agencia Estatal para la gestión de los impuestos cedidos, además de la "aplicación de los nuevos porcentajes" de participación en los impuestos.

Asimismo, se propuso alcanzar el "traspaso de la Inspección de Trabajo" que prevé el Estatut para "potenciar su acción en el control de la contratación y de las condiciones de trabajo". En este campo, se propuso "mejorar la calidad del empleo, reduciendo la temporalidad y haciendo frente a la siniestralidad", para lo que anunció "un Plan de Choque para reducir la precariedad laboral y la economía sumergida", así como "un sistema de formación profesional a lo largo de toda la vida".

El presidenciable anunció "una política fiscal que dé apoyo a las familias y a la cohesión social". En cuanto a las empresas, consideró "imprescindible" ayudar especialmente a las pymes", para las que anunció "una línea de crédito a través del Institut Català de Finances" que las ayude "a adaptarse a las nuevas normativas".

Anunció una política de "apoyo a la innovación en las empresas" y se comprometió a "impulsar el mercado de transferencia de la tecnología para garantizar que el esfuerzo en I+D+i sea equivalente a más crecimiento y ocupación y a empresas más competitivas internacionalmente", consolidando la Eurorregión como "espacio prioritario" en este campo.

OBJETIVO: EL 2% DEL PIB A I+D.

Así, prometió un incremento en las líneas de ayudas a la I+D "con el objetivo de superar la media europea del 2% del PIB en 2010", poniendo en marcha además "instrumentos de cobertura de avales" para que las pymes catalanas puedan "obtener créditos públicos destinados a proyectos de I+D+i".

Además del desarrollo del Plan Estratégico de Internacionalización de la empresa catalana 2005-2008, y la elaboración del periodo 2009-2012.

Montilla presentó un futuro Gobierno que dé "apoyo al tejido empresarial y a los sectores productivos", potenciando especialmente "las estructuras comerciales que configuran el comercio urbano", prioritariamente "el pequeño y mediano comercio", y la creación "de un modelo de desarrollo turístico" de calidad, a través de la implementación del Plan Estratégico de Turismo de Catalunya 2005-2010 "para consolidar un modelo turístico que haga de Catalunya un destino líder a nivel mundial".

El futuro presidente catalán no eludió tampoco las medidas destinadas a la agricultura, en las que anunció la aprobación de "una Ley Catalana de Contratos de Cultivo"; un Plan de Eficiencia y Ahorro de Agua "basado en la nueva cultura del agua" que "modernice los antiguos regadíos"; el desarrollo de un Contrato Global de Explotación; un plan de "formación de profesionales agrarios" para adaptarlos "a las innovaciones y nuevas exigencias", y una apuesta por la "competitividad de la industria agroalimentaria en la economía global".