IU dice que Ibarra rechaza gestión andaluza del Guadalquivir como presión para que Chaves acepte el oleoducto de Huelva

MÉRIDA, 23 May. (EUROPA PRESS) -

El coordinador general de IU en Extremadura, Víctor Casco, afirmó hoy que el presidente extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, se ha mostrado en contra de la gestión andaluza del río Guadalquivir para intentar presionar a su homólogo Manuel Chaves de cara a la construcción del oleoducto que atravesará Huelva para abastecer a la refinería proyectada en la provincia de Badajoz, y que cuenta con el apoyo de la Junta de Extremadura.

En rueda de prensa, el líder de IU en Extremadura mostró su apoyo al estatuto andaluz y a la gestión del río Guadalquivir propuesta en el mismo, que incluye un consorcio en el que tengan presencia las comunidades de Andalucía, en cuyo territorio se encuentra el 95 por ciento del río, así como también estén representadas Murcia, Castilla-La Mancha y Extremadura.

Así, dijo que el "arranque" de Rodríguez Ibarra acerca de llevar al Tribunal Constitucional el estatuto si finalmente recoge la gestión del río, se enmarca en su "afán por declararle la guerra civil a todos los parlamentos autonómicos", como ya ha hecho anteriormente -según dijo- con el vasco y el catalán.

Casco argumentó que la verdadera motivación de las palabras de Ibarra tiene dos vertientes. Por un lado, limitar el "impacto mediático y social" que en su opinión causó su afirmación acerca de que los socialistas extremeños votaron a favor del Estatuto de Cataluña por "disciplina de partido", lo que para el líder extremeño de IU significa que "frente a los intereses de los extremeños, antepone los de su propio partido".

Por otro, dijo que se trata de una "amenaza" al presidente andaluz, Manuel Chaves, de manera que "si no traga con el oleoducto de Huelva a Extremadura para llevar crudo a la refinería del Grupo Gallardo, hará todo lo posible por intentar llevar al Constitucional el estatuto andaluz", dijo Casco.

Por tanto -añadió-, se trata de "una presión al Gobierno de Andalucía para que ceda y acepte definitivamente" el oleoducto de la Refinería Balboa, proyectada en Tierra de Barros, en la provincia de Badajoz.

REFINERÍA

Por otro lado, se refirió al anuncio oficial por parte de la petrolera Shell de que será el socio tecnológico de la Refinería Balboa. Así, destacó que la compañía anglo-holandesa no participe en ningún caso con capital en la empresa. En su opinión, los socios tecnológicos "tienen que tener una parte del capital o, si no, no son socios, son otra cosa, son clientes o proveedores".

Según Casco, esto significa que Shell aportará no sólo la técnica, sino también los trabajadores, y que asimismo comercializará el producto fuera de Extremadura, con lo que se vendrán abajo las declaraciones de Ibarra sobre que la gasolina será más barata en Extremadura con la puesta en funcionamiento de la instalación.

EL GOBIERNO, JUEZ Y PARTE

Por otro lado, pidió a los gobiernos autonómico y central que se mantengan al margen y "dejen de alentar" el proyecto, porque en su opinión los ejecutivos socialistas de Mérida y Madrid se han convertido en "jueces y parte interesada" de la puesta en marcha de la refinería.

Casco se refirió así a las declaraciones realizadas por la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, el pasado fin de semana con motivo de su visita a la región, en las que mostraba el apoyo del Ejecutivo central al proyecto.

El líder de IU explicó que ambos ejecutivos piden respeto por los informes técnicos al tiempo que, por un lado, la Junta repite que el proyecto se llevará a cabo y, por otro, el Gobierno central lo considera un elemento positivo para la región y el conjunto nacional.

"No podemos tener confianza en la supuesta imparcialidad de unos estudios técnicos cuando quienes deben encargarse de defender esa imparcialidad están demostrando unas ansias terribles por poner esa industria contaminante en Extremadura", dijo Casco.

Añadió que los gobiernos de Madrid y Mérida "ni creen en la separación de poderes, ni van a actuar con imparcialidad", porque "ya han decidido que van a poner la refinería en Extremadura, digan lo que digan los informes técnicos, que dirán lo que quiera que diga el Gobierno central, y digan lo que digan los ciudadanos, que nunca les ha importado".

Por otro lado, reiteró que el proyecto de Gallardo es un asunto "crucial" para el PSOE, tanto por "los intereses internos y crematísticos de algunos de sus miembros", entre los que citó a Francisco Fuentes y al propio Rodríguez Ibarra; y también porque "solo con ese proyecto se puede hacer frente a las carencias económicas a las que se enfrentarán los extremeños, porque durante años no se ha invertido para generar industrias interesantes y compatibles con el medio ambiente, con el dinero de la UE".

De otro lado, anunció que su grupo parlamentario seguirá mostrando su oposición al proyecto en la Asamblea de Extremadura, y que reclamará a la Junta de Extremadura que "por pulcritud" se mantenga al margen y "deje de alentar tanto el proyecto", así como que "no se conviertan en parte interesada" del mismo.

Finalmente, anunció que IU Extremadura estará presente en una concentración convocada el próximo domingo día 28 de mayo, frente al Parlamento andaluz, en Sevilla, convocada por las plataformas ciudadanas extremeñas y andaluzas contra el proyecto.