Cree que Zubi-Zuri es "una obra singular" y que el Consistorio quería una obra de Calatrava para que Bilbao fuera referente
BILBAO, 3 May. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de lo Mercantil número 1 de Bilbao ha desestimado la cuestión de competencia planteada por el Ayuntamiento de la villa en el procedimiento que el arquitecto Santiago Calatrava, creador de la pasarela Zubi-Zuri, planteó contra el Consistorio y, tras rechazar que el caso se traslade a lo Contencioso, ha decidido mantener el procedimiento en su jurisdicción.
Calatrava emprendió acciones judiciales contra el Ayuntamiento y las constructoras al considerar afectado su derecho moral a la integridad de la obra, por la colocación de la pasarela de Izosaki hasta Isozaki Atea.
Según el auto hecho público hoy, el Consistorio argumentó que la Ley de Propiedad Intelectual no protege la obra edificada, sino sólo los planos, maquetas y proyectos, por lo que la petición de que se retirara la nueva pasarela de Isozaki constituye "una cuestión urbanística que debía ser solventada por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo y no por el Mercantil".
Sin embargo, el magistrado desestima la alegación por entender que la protección que otorga la Ley "se refiere a cualquier obra artística original, consideración que merece el puente Zubi-Zuri". Según defiende, la protección de la obra es posible "siempre que posea un grado de originalidad suficiente, que parece innegable en el caso de la pasarela Zubi-Zuri, que se ha convertido en símbolo señero de la moderna villa de Bilbao".
En su opinión, aun en el caso de no ser considerada "obra artística", podría ser "obra plástica", y agrega que, si la norma protege los planos, maquetas y el diseño, "debe proteger también la obra ya erigida".
DERECHO DE AUTOR
El juez alude al Convenio de Berna, que protege el derecho de autor y en el que "dicha protección sí se dispensa a la obra y no sólo al proyecto", y añade que "hay precedentes judiciales en España que han concedido amparo como derecho de autor a obras arquitectónicas".
Para el titular del Juzgado de lo Mercantil, el caso que se trata no sitúa "ante un conflicto entre un interés público y privado", aunque matiza que, sin duda, la pasarela cumple una función pública al permitir a los vecinos de Bilbao "un acceso cómodo y funcional para pasar de un lado a otro de la ría, comunicando ambas márgenes a través de un paso exclusivamente dedicado a los peatones".
Sin embargo, advierte de que, "que eso sea así no impide constatar que, además, sea una obra arquitectónica singular". También recuerda al Ayuntamiento que "quien decidió que en Bilbao se ubicara esa obra conocía perfectamente los antecedentes y quería que en la villa hubiera una obra de Calatrava, igual que ha querido que nuestra localidad se convierta en referente internacional de las modernas tendencias arquitectónicas".
El magistrado señala que es "perfectamente compatible el uso público de la pasarela ideada por el demandante con los derechos de autor que le asisten y recuerda que hay "viviendas u oficinas singulares que pueden seguirse utilizando por sus moradores como domicilio o lugar de trabajo".
En este sentido, apunta a casos como la Torre Bizkaia o el Museo Guggenheim, en los que no se impide "reconocer a Cesar Pelli, Frank Gehry o al propio demandante su autoría y los derechos que llevan consigo".
El auto judicial, hecho público hoy, supone que la tramitación del procedimiento continuará en el Juzgado de lo Mercantil. El Ayuntamiento tiene ahora un plazo de 18 días para responder a la demanda.
