El juez rechaza reconstruir el asesinato del guardia civil de Salou (Tarragona)

Actualizado: viernes, 6 marzo 2009 21:09

Los forenses no puden determinar cómo se efectuó el disparo que mató al agente

TARRAGONA, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -

El magistrado de la Sección Cuarta de la Audiencia de Tarragona decidió hoy desestimar la petición de la defensa de realizar, la próxima semana, una reconstrucción del intento de secuestro de un matrimonio de joyeros en Salou en el que falleció un guardia civil. No obstante, aceptó hacer una inspección ocular del lugar donde sucedieron los hechos.

La prueba se realizará el 18 de marzo a las 9.30 horas en el edificio Fidias, situado en la Vía Romana de Salou. Además del magistrado, el fiscal y los abogados, asistirán a este ejercicio los acusados.

En la sesión de hoy, los médicos forenses no aportaron conclusiones claras sobre cómo se efectuó el disparo que mató el agente Juan Manuel M.R., el 1 de marzo del 2007. La bala le entró por un antebrazo y atravesó la zona intercostal hasta llegar al hígado, explicaron.

Según las pruebas, fue una trayectoria descendente de unos 30 grados de inclinación, que dejó tres orificios en el cuerpo de la víctima. El proyectil tocó órganos vitales de Juan Manuel M.R., lo que le provocó la muerte al instante.

Las dudas llegaron a la hora de determinar la posición del agente y del acusado en el momento del disparo. Los agentes que presenciaron los hechos afirmaron que la víctima estaba erguida y que hizo un movimiento defensivo con el brazo para protegerse al ver que Santos Silveiro G. M. le encañonaba.

Igualmente, dijeron que mientras se producía el disparo, el agente tenía agarrado al principal acusado, Santos Silveiro G. M., por la cintura con las dos manos y que éste disparó con la mano izquierda. Sin embargo, las pruebas que realizaron los forenses, confirman que el procesado es diestro tal como él mismo aseguró.

Los peritos de la Fiscalía señalaron que, de acuerdo con la herida que presentaba, la víctima no podía estar erguida cuando recibió el disparo, pues indicaron que éste se hizo desde arriba, es decir con el acusado en un plano más elevado que la víctima y ésta mirando hacia el techo.

Un perito citado por la defensa desmontó esta versión apuntando que, teniendo en cuenta la trayectoria de la bala, el disparo también pudo haberse hecho con la víctima cayendo hacia delante y el acusado ya fuera de un ángulo de tiro.

Este mismo especialista indicó que la cantidad de pólvora encontrada en la mano izquierda del acusado no es suficiente para asegurar que efectuara disparo alguno. De todas formas, la prueba se realizó unas 12 horas más tarde de los hechos con lo que pudo haberse limpiado los residuos.

También señaló que en el uniforme de la víctima tampoco había suficientes residuos cómo para confirmar que el disparo se efectuó desde muy cerca. A su entender, el disparo pudo realizarse desde una distancia de al menos 80 centímetros.