SEVILLA, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Consejo de Gobierno de la Junta aprobó hoy una declaración institucional, con motivo del XXVI aniversario del referéndum del 28-F por el que Andalucía accedió a la autonomía plena por la vía del artículo 151 de la Constitución, en la que pide "generosidad, altura de miras y compromiso insobornable con la Andalucía de hoy y con los andaluces de mañana" en la "recta final" del proceso de reforma del Estatuto.
En la declaración, resumida en rueda de prensa por el consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, el Ejecutivo andaluz defiende que la reforma del Estatuto andaluz "no puede ser fruto ni de la emulación de otros ni menos aún de la confrontación con otros", sino que debe servir para "realizar importantes aportaciones a España porque a Andalucía sólo le interesa lo que a la postre sea bueno para el conjunto del país".
La declaración institucional con motivo del 28-F se inicia resaltando los "beneficios evidentes" que ha tenido para Andalucía el esfuerzo por la autonomía plena realizado durante la transición, "que no sólo ha propiciado el período más intenso y prolongado de progreso y desarrollo en todos los órdenes, sino que ha favorecido la recuperación de la autoestima de los andaluces", por lo que confía en poder "seguir alcanzando las metas que nos propongamos porque nuestra tierra ha dado sobrada muestra de su capacidad para el aprovechamiento de las oportunidades que la democracia y la autonomía le han brindado, en el marco de la Constitución Española de 1978".
"PROGRESO ARMÓNICO DE TODOS"
En este sentido, la Junta reivindica que "Andalucía no sólo tiene el derecho a seguir avanzando y a dibujar un horizonte más ambicioso de prosperidad y autogobierno, sino que tiene la obligación de aportar lo mejor de sí misma a la España democrática, próspera, avanzada y libre que entre todos estamos construyendo cada día", al tiempo que pone de manifiesto que "en estas casi tres décadas de libertad y autogobierno, hemos comprobado cómo el desarrollo de las autonomías y el bienestar de los territorios no se ha hecho a costa de ningún otro sino, al contrario, garantizando el progreso armónico de todos".
"Así ha sido hasta ahora y así va a seguir siendo", subraya la declaración institucional, en la que la Junta no duda de que "el caudal de fuerza de los andaluces es plenamente conciliable con el del resto de los españoles y tiene que ser coherente con los valores que caracterizan nuestro sentir como nacionalidad histórica en el seno de España: valores hondamente enraizados con la solidaridad, el equilibrio territorial, la igualdad básica de todos los españoles y el respeto a los hechos diferenciales, fruto de la pluralidad y diversidad de la nación española".
Para ello, el Ejecutivo que preside Manuel Chaves asume como "límites" el marco constitucional vigente, "que lejos de suponer una cortapisa al autogobierno, es, al contrario, la garantía y el baluarte de nuestras libertades, junto a las del resto de los españoles", e insiste en que "nuestra razón de ser no sólo no es incompatible con una idea cabal de España sino que la propia idea de España no se entiende sin la aportación, sustancial, que Andalucía y los andaluces han realizado al acervo común español".
"TRÁNSITO HISTÓRICO"
En relación al "tránsito histórico" que supone la "recta final" de la reforma del Estatuto, la Junta considera "absolutamente imprescindible" actuar "con generosidad, altura de miras y compromiso insobornable con la Andalucía de hoy y con los andaluces del mañana", ya que está convencida de que "si actuamos hoy como lo hizo la generación de andaluces que hizo posible el 28-F de 1980, dentro de un cuarto de siglo nuestro esfuerzo será recordado con el mismo reconocimiento con el que ahora conmemoramos aquella inolvidable jornada".
"Nuestro nuevo Estatuto de Autonomía, que se construye sobre los cimientos del que ha sido una magnífica herramienta de autogobierno desde su aprobación en referéndum, hace 25 años, no puede ser fruto ni de la emulación de otros ni menos aún de la confrontación con otros", advierte el Gobierno andaluz, que pone de manifiesto que "el innegable desarrollo económico y del empleo experimentado en esta etapa y las conquistas sociales asociadas a este crecimiento, no nos impiden ver que queda un largo camino por recorrer".
Así, la Junta apuesta "redoblar esfuerzos" para hacer frente a problemas como "la siniestralidad y la excesiva temporalidad laboral; la violencia de género y cualquier fórmula de discriminación; o para ofrecer la mayor atención a las personas dependientes" y resalta que precisamente la proposición de Ley de reforma del Estatuto "se distingue por constituir un catálogo de ambiciosos derechos sociales", puesto que el objetivo final no es otro que lograr "una mejora tangible en la calidad y bienestar de vida de todos los andaluces".