MÁLAGA 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
Un jurado popular declaró hoy por unanimidad culpables de un delito de asesinato a dos hombres de nacionalidad colombiana por la muerte de un hombre, tras una pelea ocurrida en la puerta de una discoteca de Ronda (Málaga) en diciembre de 2005, según informaron fuentes judiciales.
De esta forma, el tribunal popular asumió la tesis de la acusación particular, que representaba a la familia, y que acusaba a ambos de asesinato. En la comparecencia de hoy, esta parte mantuvo su petición de 17 años de cárcel para cada uno, misma pena que solicitó el fiscal, según indicaron a Europa Press otras fuentes del caso.
La acusación pública mantuvo la petición de 60.000 euros de indemnización, mientras que el abogado de la familia continuó solicitando 200.000 euros. Fuentes de las defensas indicaron que el tribunal popular no ha contemplado atenuante alguna ni siquiera el grado de complicidad para uno de los acusados.
Los hechos sucedieron el 18 de diciembre de 2005 cuando, según el escrito de la acusación, un grupo de amigos, entre ellos la víctima, fueron a una discoteca ubicada en la plaza Carmen Abela de la localidad malagueña de Ronda, donde estuvieron varias horas, y discutieron con los dos acusados.
Cuando los cinco estaban en la calle, comenzaron de nuevo a pelearse y agredirse durante unos minutos. A continuación, los acusados, entonces con 20 y 21 años de edad, se marcharon del lugar y se fueron a casa, donde se cambiaron de chaqueta para ocultar varios cuchillos de cocina y regresaron a la discoteca.
Allí, se produjo otra pelea que se saldó con la muerte de un hombre. El colombiano que según las acusaciones fue el presunto autor material del apuñalamiento negó que tuvieran la intención de matar a nadie y aseguró que regresaron con cuchillos por "miedo" a una nueva agresión por parte del grupo de hombres en el que estaba la víctima.
El otro acusado, que había sido detenido en 15 ocasiones cuando vivía en San Sebastián, insistió en que volvieron al local para recoger su coche, "no para buscar pelea"; y reconoció que, aunque dijo a su amigo que no cogiera armas, él mismo llevaba un cuchillo de untar mantequilla.