MADRID, 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, Emilio Silva, instó hoy a los diferentes partidos a que en el proceso de negociación del proyecto de ley de la llamada Memoria Histórica, que pasó ayer su primer trámite parlamentario en el Congreso, encuentren una solución para los muchos damnificados de la guerra civil y el franquismo que no han recibido aún ningún tipo de amparo por parte del Estado.
En declaraciones a TVE recogidas por Europa Press, Silva mostró su alegría por que la Cámara Baja diera ayer luz verde a esta iniciativa gubernamental, con la que desde la citada asociación esperan que el Gobierno "asuma su responsabilidad".
No obstante, la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, que ayer solicitó al juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón que investigue a 30.000 desapariciones durante la guerra civil y la dictadura, apuntó, en boca de su presidente, que el proyecto no cumple las expectativas de las familias de esos desaparecidos en la medida que tan sólo insta a los ayuntamientos a facilitar la labor de las exhumaciones.
A juicio de Silva, "no es comprensible" que un derecho humano básico, como es recibir una sepultura "digna", con independencia de las ideologías, dependa de un grupo de arqueólogos y forenses voluntarios. Por tanto, destacó la necesidad de una ayuda por parte del Estado para efectuar una labor con la que la asociación ha conseguido exhumar a 800 personas en seis años.
Dicho esto, el presidente de la citada asociación evidenció, asimismo, que el proyecto de ley no contemple la anulación de los juicios sumarísimos, porque de alguna manera, en su opinión, se mantiene la legitimidad de unos tribunales "que no la tenían". Sin embargo, dijo no entender que los partidos políticos hayan hecho de este problema "el eje de su debate", cuando existen otros asuntos más importantes para poner sobre la mesa.
Entre éstos destacó la enseñanza de la historia de España, asunto en el que, dijo, la iniciativa se queda "corta". A su entender, "no puede ser" que uno de los periodos españoles que más literatura ha generado se resuma en los libros en tan sólo "cuatro páginas", de las cuales, precisó, dos son letras de canciones en varias ediciones y las otras dos una visión de cómo se movían los ejércitos.
