MADRID 26 Jul. (EUROPA PRESS) -
El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, denunció hoy la "injerencia inaceptable" en la política española del embajador israelí, Víctor Harel, quien, a su juicio, se ha "extralimitado" en sus funciones y debería dar explicaciones a los españoles. Es más, dijo que el Gobierno debería "llamar al orden" al embajador.
En una rueda de prensa en el Congreso, tras su reunión con el portavoz del Grupo Socialista, Diego López Garrido, Llamazares se refería así al cruce de reproches que han mantenido el socialista José Blanco y el propio embajador a raíz de las declaraciones sobre Oriente Próximo que el primero hizo el día anterior.
El líder de IU señaló que si se produce "algún malentendido" entre el Gobierno israelí y el español, debe solucionarse entre ambos ejecutivos "y en ningún caso" ese papel debe recaer en un embajador. A su juicio, si el país hebreo tiene algo que decirle al Ejecutivo español "debe hacerlo el gobierno israelí" porque un embajador no está "para eso" en un país.
"Denunciamos la injerencia inaceptable del embajador israelí en España, que no tiene por qué intervenir en nuestra vida política y mucho menos rectificar a ningún dirigente político", enfatizó Llamazares.
Por eso, señaló que el Gobierno debería "llamar al orden" al embajador israelí, quien, a su juicio es el que "tiene que dar explicaciones a los españoles", dado que España tiene ciudadanos en la zona "que son víctimas de una guerra unilateral". Según añadió, el Ejecutivo "no debería en ningún caso permitir" esta "injerencia" de Harel, que "no es nueva".
OBSERVADORES ONU, "OBJETIVOS CIVILES"
El coordinador general de IU acusó a Israel de ejercer el "terrorismo de Estado" en el Líbano y en los territorios ocupados al "utilizar el terror para objetivos políticos". En su opinión, la muerte esta noche de cuatro observadores de la ONU en un ataque israelí, avala las acusaciones lanzadas el lunes por Blanco, cuando afirmó que las víctimas civiles eran un objetivo buscado por Israel.
"Se sabía dónde estaban y cuál era su localización y ahí no hay posibilidad de error. Ahí no hay escudos humanos y se puede decir claramente que el Gobierno israelí tiene objetivos civiles", afirmó, para calificar de "hipócrita" la actitud de "escándalo" que ha mantenido el embajador israelí tras las declaraciones del socialista José Blanco.