MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
El coordinador general de Izquierda Unida (IU), Gaspar Llamazares, consideró hoy que España debe ser "más neutral y menos intervencionista" desde el punto de vista político, "más respetuosa" con los países de América Latina, "y no dar lugar a una especie de resabio neocolonial" que no le "favorece en absoluto".
En declaraciones a la Cadena Ser recogidas por Europa Press, valoró así la situación actual de las relaciones con Venezuela y Nicaragua en particular, y con América Latina en general, después de la Cumbre Iberoamericana del pasado fin de semana. A su juicio, "antes incluso" de que se produjera el "desencuentro" entre el Rey Don Juan Carlos y el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, "ya había alguna sensación de que la cosa no iba muy bien".
En este sentido, recordó que después de ver algunos debates de la Cumbre en televisión, le comentó a su mujer que eso parecía una "asamblea de Facultad" y que "no se sabía cómo iba a terminar". "Debemos interrogarnos sobre el futuro de las cumbres, si estos encuentros con una agenda tan abierta y donde los dirigentes políticos con una cierta vanidad hacen política exterior e interior al mismo tiempo, sirven de mucho", expuso.
Para Llamazares, quien abogó por "repensar el modelo" de las cumbres iberoamericanas, lo que Chávez dijo en la Cumbre era "verdad", si bien puntualizó que habría que valorar si la cumbre era la "mejor oportunidad y si los términos eran los más adecuados sobre Aznar". Asimismo, afirmó que la actual escalada verbal debería "aplacarse y debería reconducirse la situación", al tiempo que subrayó que el PP no puede dar "demasiadas lecciones" sobre América Latina, puesto que dejó una "herencia muy negativa que todavía no se ha recompuesto".
PROBLEMAS "HEREDADOS" DEL PP
Respecto a los conflictos con Venezuela y Nicaragua, indicó que son dos problemas que se deberían "abordar". "Por una parte, no se puede ocultar que hay un problema de relaciones diplomáticas con los gobiernos de América Latina. En el periodo de Gobierno del PP hubo una participación del Gobierno en una asonada contra el gobierno democrático venezolano, y eso creó muchas heridas que todavía no están sanadas", subrayó.
De la misma forma, resaltó la existencia de una "herencia de esa política intervencionista" que deja a España como si fuera una especie de "hermano menor de Estados Unidos y fuera aquello su patio trasero". Según dijo, tampoco ha sido muy "afortunada" la participación de nuestra embajada en las últimas elecciones nicaragüenses, "donde se promovía la unidad de la derecha frente a la amenaza sandinista", algo que crea "heridas que hay que despejar".
"Tenemos también que avanzar en la responsabilidad social de las empresas españolas en América Latina. Cualquiera que vaya a Nicaragua en relación a Unión Fenosa, o vaya a cualquier otro país de América Latina, se da cuenta de que hay desconfianzas todavía, no sólo por parte de los gobiernos sino también de los ciudadanos, con respecto a esas empresas que se considera que no reinvierten en mejorar las condiciones de vida de esos países y se quedan en exceso con los resultados económicos", destacó.
