SANTIAGO DE COMPOSTELA, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
La capital gallega se sumó hoy al Día Internacional de la Lucha contra la Violencia Doméstica en un acto simbólico celebrado en la plaza del Toural en el que el Ayuntamiento compostelano obsequió a los centenares asistentes con paraguas verdes como símbolo de "esperanza" para que "no ocurran tantas muertes" por maltrato.
A esta jornada también acudieron cinco periodistas que, según indicó la Concejalía de Mujer de Santiago, se convirtieron en portadores de las respuestas de las mujeres en el acto que también contó con la lectura de un manifiesto a cargo de la periodista de la Televisión de Galicia (TVG), Irene Lourido.
En el discurso se recordaron las 61 mujeres muertas en lo que va de año y se afirmó que la violencia de género es un "fenómeno estructural" común a todas las sociedades y que fue tolerado y asumido como "algo natural". Para manifestar el rechazo a esta lacra social, la periodista incidió en la necesidad de seguir trabajando para que el maltrato a la mujer sea algo "inadmisible e injustificable".
Por otra parte, se mencionaron las últimas iniciativas legales que tratan de erradicar la violencia de género y que hacen que esta realidad pase de "ser privada para tener atención pública". Al finalizar la lectura, el alcalde de Santiago de Compostela, Xosé Sánchez Bugallo, pidió un minuto de silencio en recuerdo de las "mujeres muertas a manos de sus parejas o ex parejas".
Durante todo el acto estuvieron colgadas del del Pazo de Bendaña, sede de la Fundación Granell, banderolas con frases representativas de las situaciones relacionadas con violencia doméstica. "Lo hago porque te quiero" o "tú no eres mi dueño" fueron algunos ejemplos que penduraron en el acto conmemorativo que también contó con la actuación del grupo de cámara Minuetto.
La respuesta a la violencia que padecen las mujeres tiene efectos que, como indicó la técnica de la Concejalía de la Mujer, Gloria Novo, "se notan en cuanto a las denuncias y a las medidas de protección". Así, los datos de la Casa de Acogida apuntan que este 2006 llegaron 32 personas, mientras que el pasado año hubo 51 acogidos. Asimismo, reconoció que "queda mucho por hacer".
