MADRID 17 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Generalitat de Cataluña, Pasquall Maragall, afirmó hoy que "por el bien de España y por el bien de Cataluña" hay que "propugnar siempre una relación de intercambio constante y de afecto explícito" y admitió, que en "estos dos años y medio", en referencia a las relaciones con España, las cosas "no han transcurrido por los cauces previstos, deseados o esperados".
Maragall explicó, en el discurso de entrega del premio a Blanquerna a Antonio Garrigues, que su Gobierno "sabía que no iba a ser fácil", pero que no creían que "por intereses tácticos de algunos llegaría a ser tan difícil".
Según el presidente de la Generalitat se ha generado un clima en el que "ha habido un exceso de ruido" del que todos los partidos políticos son responsables ya que, en su opinión, en la generación de este clima "nadie ha sido inocente". "Seguramente los extremos han contribuido a enrarecer el ambiente peligrosamente", sentenció.
Maragall dijo que en los últimos treinta años Cataluña y el resto de España han mantenido una relación basada en una "respetuosa no beligerancia mutua" y afirmó que "ha medida que el clima "se sosiega" la propuesta de Cataluña "va siendo entendida", y sus efectos en España "empiezan a ser mejor aceptados". En este sentido Maragall señaló que el Estatut de Cataluña "no quería responder a un único interrogante, sino a muchos".
Maragall defendió en su discurso una España "plural y abierta", sostuvo que el tiempo de la "confrontación debe de ser sustituido por el tiempo de la templanza" y agregó que si la sociedad civil se hubiera manifestado con mayor rotundidad la confrontación política hubiera sido menor.