Maragall afronta el jueves el primer pleno en minoría tras la salida de ERC

BARCELONA, 14 May. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, afronta el próximo jueves su primer pleno con el Gobierno en minoría tras el cese de los consellers de ERC y en el que está previsto la aprobación de dos leyes y el debate de totalidad de otras cuatro. Las hasta ahora consellerias de ERC son las responsables de tres de estas iniciativas legislativas.

Así, está prevista la aprobación de la ley de la Agencia Catalana de Servicios a la Juventud, impulsada por el ex 'conseller primer' Josep Bargalló, y que verá la luz sin problemas. Por su parte, la aprobación de ley de profesiones tituladas y colegios profesionales, impulsada por la Conselleria de Justicia, dependerá de los votos de ERC, ya que CiU y PP habían presentado enmiendas a la totalidad.

ERC ha anunciado que votará a favor de los proyectos impulsados por los departamentos que ocupaba hasta ahora, así como el resto de las iniciativas del Gobierno que no se modifiquen en su trámite parlamentario y respeten el contenido del Pacto del Tinell.

Las antiguas consellerias republicanas también son las responsables de otros dos proyectos de ley que se someterán a debate de totalidad son el proyecto de ley de fomento de la ciencia y la innovación y la ordenación de la investigación, que impulsó Carles Solà desde Universidades antes de su relevo por Manel Balcells --también ya ex conseller--, y la ley de modificación de la ley municipal y de régimen local, de la conselleria de Gobernación, que ya no ocupa un republicano, sino el socialista Xavier Sabaté.

Los otros proyectos de ley del Gobierno que deben superar el debate de totalidad son el de reforma del Institut Català de la Salut (ICS) y la ley del Memorial Democrático. En el pleno, los nuevos responsables de cada área deberán afrontar igualmente tres interpelaciones de la oposición sobre materias hasta ahora responsabilidad de ERC.

Una de las interpelaciones es especialmente delicada, ya que CiU tenía previsto reclamar responsabilidades políticas a la ex consellera de Bienestar y Familia, Anna Simó, por el caso de Alba, la niña maltratada de Montcada.

El tripartito tiene otros trece proyectos de ley en tramitación en el Parlament, cuatro de ellos iniciativa de antiguas consellerias ocupadas por ERC. Los proyectos de ley de servicios sociales y de prestaciones económicas de asistencia social habían sido las grandes apuestas de la legislatura de la ex consellera Simó y que probablemente decaigan por falta de consenso.

Asimismo, está pendiente la ley de medidas de conciliación de la vida personal, familiar y laboral del personal al servicio de las administraciones públicas de Catalunya, y la de creación de la Agencia Catalana de Turismo, todavía sin aceptar a trámite por la Mesa del Parlament.

LEYES CON PROBLEMAS.

El proyecto de ERC que tendría más problemas para salir adelante es el de la Oficina Antifraude, que ha enfrentado durante meses a republicanos y socialistas y que está pendiente del dictamen del Consell Consultiu solicitado por CiU, PSC, PP e ICV.

Por su parte, ERC podría poner en problemas a sus antiguos socios de Gobierno por el proyecto de ley de pensiones a altos cargos de la Generalitat de adscripción parlamentaria, impulsado por la Conselleria de Economía y que ya tuvo que ser enmendado por el propio tripartito ante las críticas recibidas.

Estando en el Gobierno los republicanos no se mostraron nunca demasiado entusiasmados con el proyecto en incluso podrían ponerle reparos en el caso que llegara a votación en el pleno del Parlament antes de acabar la legislatura.

Finalmente, el proyecto de modificación de la ley de cajas, todavía pendiente de admisión a trámite en el Parlament, podría volver a poner en apuros al Gobierno en minoría.

La previsión del tripartito era que estuviera aprobada el próximo noviembre, pero la convocatoria de elecciones anticipadas truncaría los planes del Gobierno catalán. Sólo un trámite por la vía de urgencia salvaría la aprobación de la ley esta legislatura, lo que requiere de la unanimidad de todos los grupos.