BARCELONA, 2 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Generalitat de Catalunya, Pasqual Maragall, aseguró hoy que "se equivocan los que apelan a una nueva frustración" para no aprobar la reforma del Estatut de Catalunya, en relación a la negativa de ERC a apoyar el texto.
Maragall consideró que "el sentimiento de la mayoría" es que Catalunya "ya tiene suficiente de insatisfacción y de tenerse que quejar", por lo que "es necesario afrontar el futuro con optimismo" y anunció que los que no apoyan el proyecto "se llevarán una sorpresa".
El presidente catalán, que mañana afrontará la defensa del proyecto del texto en el Senado, se mostró "seguro" de que saldrá adelante y aseguró que "todos los esfuerzos y renuncias" han "valido la pena".
Según Maragall, el valor del Estatut es "inmenso" porque conseguirá que "una ley aprobada por el estado español reconozca que Catalunya tiene una personalidad nacional".
En particular, resaltó el reconocimiento a los "derechos históricos" de Catalunya, así como la "igualación bien estructurada de las lenguas catalana y castellana", la asunción de "nuevas competencias" por parte de la Generalitat y de "una mayor y muy superior capacidad normativa, con la creación de una agencia tributaria propia", que posibilitará una "situación económica más justa y más entendedora".
Además, señaló que "nuestro gobierno dará un salto adelante muy importante, porque probablemente será el que tenga más competencias de toda Europa" y anunció que el Estatut de Catalunya se convertirá en un "referente" para las demás autonomías.
PIDE LA GESTIÓN DEL AEROPUERTO.
Maragall también reiteró su propósito de conseguir que la Generalitat tenga la gestión de los aeropuertos catalanes y aseguró que "no pararemos hasta conseguirlo", ya que Barcelona es un enlace estratégico, argumentó.
Asimismo, reconoció que las obras del AVE "no han ido todo lo rápido que tendrían que haber ido" y admitió que, a pesar de su "buena situación" económica, Catalunya no cuenta con una red óptima de infraestructuras, por lo que manifestó la necesidad de que gestione directamente las principales vías de comunicación.
Maragall hizo estas declaraciones durante la conferencia que pronunció en el Institut Químic de Sarrià (IQS), en el marco de la celebración del centenario desde la creación este centro universitario y de la asamblea anual de la Fundación Empresas IQS, que este año aportará 500.000 euros para la construcción del nuevo centro de Bioingeniería del instituto.
