Maragall cree de "malos catalanes" usar el referéndum con interés partidista

Actualizado: viernes, 9 junio 2006 23:40


MATARÓ, 9 Jun. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, lanzó hoy desde Mataró un llamamiento al resto de partidos para que "separen" el Estatut de la "batalla" entre contrincantes políticos y advirtió que "no tiene perdón de Dios que algunos partidos aprovechen la campaña del referéndum para ir en contra de otros". "No es ser buenos catalanes", dijo, al tiempo que reivindicó el Estatut como "el Estatut de todos", de los "de izquierdas y los conservadores, nacionalistas o no", de todos, "incluso de los que no lo votarán".

Maragall fue el protagonista de un mitin en el Casal de la Nova Aliança de Mataró donde se rodeó de diez de los once consellers socialistas de su Gobierno: Carme Figueras, Ferran Mascarell, Joaquim Nadal, Joan Manuel del Pozo, Marina Geli, Montserrat Tura, Antoni Castells, Jordi Valls, Xavier Sabaté y Josep Maria Vallès, y en el que estuvo acompañado por el primer secretario del PSC, José Montilla.

En su intervención, Maragall pidió "como presidente" de la Generalitat "un esfuerzo para separar el Estatut de la batalla entre partidos" y recordó que el referéndum "no es como si estuviéramos en unas elecciones de unos contra otros". Así, Maragall señaló que la convocatoria para ir a las urnas el día 18 "no es para ir contra nadie, sino a favor de todos". Por ello, instó a los ciudadanos a "no hacer caso a los que de forma partidista aprovechan la campaña para hacer propuestas electorales".

El presidente de la Generalitat insistió en que el Estatut "es de todos y será de todos, de los que lo votan y los que no" y constituye una "oportunidad única para unir a todos los catalanes en una acción colectiva". Por ello, apeló a la "responsabilidad" y el "compromiso" de los votantes con Cataluña, "los de izquierdas y los conservadores, los nacionalistas y no nacionalistas, los federales y los no federales" para que afronten el referéndum "no como una batalla de unos contra otros" sino como la ratificación de algo que "todo el mundo sentirá como suyo, incluso los que no lo votarán.

"Como presidente pido responsabilidad política y cívica", insistió recordando que Cataluña "está más allá y por encima de las decisiones tácticas y partidistas". Así, pidió un 'sí' masivo y rotundo, "sin discusión" para que al día siguiente del referéndum "sigamos haciendo camino juntos", "sin sacralizar el pasado". "La Cataluña del 'sí' será la Cataluña de todos", apostilló.

Maragall volvió a reivindicar el papel del PSC a la hora de afrontar la reforma del Estatut y esgrimió la "valentía y el coraje" de su gobierno para impulsar este proceso, en contraposición con los anteriores gobiernos de CiU. Recordó que los socialistas ya plantearon la reforma en 1995 y celebró que "finalmente hemos conseguido presentar un Estatut digno, de todos y para todos".

NO DAR ALAS AL RADICALISMO DEL PP

Previamente, el primer secretario del PSC, José Montilla, había advertido que el 'no' "da alas al radicalismo más rancio del PP", "conduce a la impotencia" y "promueve el enfrentamiento entre Cataluña y España". Admitió que el 'no' puede "tener motivos diferentes", en referencia a ERC, pero insistió en que "tendrá los mismos efectos: el PP capitalizará el resultado, paralizaría el proceso de mejora del autogobierno y no dibuja ningún escenario político alternativo".

Montilla recordó que quedan diez días para que Cataluña "afirme su vocación de autogobierno con una nueva lección de convivencia y democracia", "para acallar las voces de la desconfianza y la impaciencia, para que los catalanes expresen su confianza en un futuro de progreso común para todos".

El dirigente socialista centró sus referencias al proceso estatutario en ataques al PP y sus intentos de "desgastar a los gobiernos de José Luis y de Pasqual". Lamentó el "descaro" de los populares en su intento de "distorsionar hasta el absurdo" el contenido del Estatut para luego "criticarlo a sangre y fuego" y les recriminó que mientras "azuzan el discurso del enfrentamiento con Cataluña", donde gobiernan, "tramitan reformas inspiradas en la iniciativa catalana".

Montilla fue más allá y criticó que el PP "eleve la tensión" introduciendo en la campaña del referéndum del Estatut el proceso de paz en Euskadi. El ministro consideró esta estrategia un "profundo error y enorme irresponsabilidad" y reiteró el deseo del Gobierno central de que "más pronto que tarde" los populares se unan al Ejecutivo de Zapatero para afrontar el proceso de paz.

EL 'ESTATUT MARAGALL'

Por su parte, el alcalde de Mataró, Joan Antoni Barón, dio un nuevo nombre al Estatut al calificarlo 'Estatut Maragall' y reivindicar que los socialistas, "con su presidente a la cabeza, han sido pieza clave" en el proceso de reforma estatutaria y ahora "somos los primeros en ponernos manos a la obra por el 'sí' masivo". "Ningún voto socialista puede quedarse en casa", subrayó.

Barón, que también elogió los dos años y medio de "intenso y buen gobierno" de la Generalitat, pidió el 'sí', "por dignidad", para "parar los pies a los del PP, a Rajoy, Acebes, Zaplana y toda la parentela" y "demostrar que el modelo de los socialistas es mucho mejor que la España carca y anticuada del PP".