La menor víctima de acoso escolar en Ibiza volverá a compartir aula con sus agresoras por decisión del colegio

Actualizado: lunes, 20 noviembre 2006 18:36

El centro le ofrece un cambio de centro, pero la madre de la jóven cree que no es ella quien debe abandonar el colegio

IBIZA, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -

La madre de la menor maltratada el pasado lunes en el Instituto de Sa Blancadona por tres compañeras, Ana Aranda, supo hoy que de nuevo su hija compartirá aula con sus agresoras. Ana Aranda se reunió con el jefe de estudios para buscar una solución a la situación que vive la joven. El Consejo Escolar deberá decidir ahora qué hacer para paliar unos hechos que desde el Centro dan por zanjados, tal y como anunció Aranda en declaraciones a Europa Press.

A pesar de que el Colegio ha ofrecido a la niña un cambio instantáneo de centro, su madre considera que esta no es la solución porque "estas menores son delincuentes y deberían ser ellas quienes, no sólo sean separadas las unas de las otras, para menguar su fuerza, sino también atendidas por especialistas para buscar la raíz de sus actitudes violentas", agregó Aranda.

La madre de la menor lamentó que el Instituto le haya anunciado que no prevé aceptar esta opción "y ni siquiera coteje un cambio de clase", indicó. Aranda afirmó tener conocimiento de otro caso "similar donde una niña ha abandona el centro por recibir amenazas de algunos compañeros". La madre añadió que "las bases están en la familia, que es donde ha de modificarse un planteamiento educativo", causa por la que redundó en la necesidad de que las agresoras reciban ayuda psicológica "que solvente este vacío que no se ha sabido inculcar desde el hogar".

Aranda destacó que aunque esperará que la Comisión ejecute algún tipo de acción se pondrá en contacto con responsables de Educación para conocer los recursos existentes para que los niños estén realmente protegidos. Aranda mandó un mensaje a las agresoras "abierto al diálogo para zanjar la situación".

Mañana volverán así a las clases las tres niñas de entre 13 y 16 años que fueron expulsadas el pasado martes del Instituto, por un periodo de cinco días, una de las cuáles era detenida un día después para pasar a disposición de sus padres, tras una agresión de acoso psicológico, amenazas, insultos, patadas y tirones de pelo a la hija de Aranda.

AMANAZAS VERBALES

La menor comenzó hace dos semanas a recibir amenazas verbales y por el Messenger "que fueron denunciadas ante el Centro Escolar aunque no fue hasta que no se consumó la agresión el pasado lunes cuando el Instituto decidió tomar cartas en el asunto", según datos extraídos del testimonio de la madre de la menor agredida.

Aranda denunció ante la Policía y el Centro "el estado en el que llegó mi hija a casa con un gran daño físico y psicológico, causado por patadas, insultos y tirones de pelo que le han provocado huecos que podrían parecer alopecia". La niña, además, "tiene mucho miedo a salir a la calle", tal y como añadió.

La madre recordó que sigue estudiando recurrir a vías legales "contra cualquier persona o institución que ponga en duda la inocencia y el honor de la víctima sin aportar las debidas pruebas documentales", en alusiones a las declaraciones del Delegado del Gobierno en Baleares, Ramón Socias, donde éste aseguró "que en este caso hay denuncias y contradenuncias".

Algo que, según Aranda, "no es cierto, ya que las agresoras no han interpuesto imputación alguna, y que este señor ha emitido sin conocimiento del caso, simplemente para restar importancia y credibilidad a los gravísimos hechos acaecidos".

El próximo jueves 23 de Noviembre, padres, alumnos y profesores pitiusos podrían secundar las jornadas de huelga iniciadas estos días en el ámbito nacional para manifestar su repulsa ante el incremento de casos de bulling hacia escolares y docentes. Una convocatoria que se está distribuyendo por Internet entre los alumnos de centros pitiusos.