PAMPLONA, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno de Navarra y de UPN, Miguel Sanz, manifestó hoy que ve factible que UPN gobierne los próximos cuatro años en la Comunidad foral pero añadió que "tampoco descarto nada". Según dijo, en el partido regionalista están "muy tranquilos" y a la espera de que lo decida el PSN.
En declaraciones a los periodistas al término de un acto de imposición de la faja al general de la Guardia Civil Luis Iglesias, el presidente navarro manifestó que no tiene "obsesión de continuar en el poder a cualquier precio". "Creo que continuar en el poder sin la garantía de una estabilidad institucional sería hacer un flaco favor a los ciudadanos navarros", añadió.
Miguel Sanz explicó que UPN ya dejó clara su posición desde el principio, desde "inmediatamente después de conocer cuáles eran los resultados electorales". "Se puso de manifiesto que UPN era el partido ampliamente mayoritario puesto que había recibido la confianza mayoritaria de los ciudadanos navarros y por tanto era el partido más legitimado para seguir liderando esta comunidad", apuntó.
Sanz, que expuso que UPN recibió un aumento de votos en las pasadas elecciones, manifestó que tras romperse las negociaciones entre PSN, Nafarroa Bai e IUN "no queda más que esperar a que el Partido Socialista defina que es lo que va a hacer antes del 17 de agosto que es cuando acaba el plazo a fin de no convocar nuevas elecciones".
Según afirmó, "estamos esperando con absoluta tranquilidad", ya que, dijo, "no es un tema que dependa de nosotros". "Yo como candidato de UPN no me voy a presentar, repito, si no tengo la garantía de tener más votos a favor que en contra y al mismo tiempo si no existe una cierta garantía o compromiso de estabilidad institucional para la legislatura", aseguró.
Sobre la posibilidad de que se tengan que volver a convocar nuevas elecciones, Miguel Sanz señaló que "ni lo descarto ni lo he descartado ni lo procuro". "Pienso que sería un fracaso de la clase política el que nos viésemos abocados a convocar nuevas elecciones", dijo, para añadir que en cualquier caso UPN no sería responsable.
"Responsable sería quien no es capaz de eliminar las muchas frustraciones que sin duda existen en el seno del Partido Socialista y quien en definitiva no es capaz de posibilitar la conformación de un nuevo gobierno después de dos meses de haberse celebrado las elecciones", indicó, para añadir que la celebración de nuevas elecciones no les da ningún miedo.
Según expuso, "nosotros lo que queremos es que Navarra siga teniendo como ha tenido hasta ahora un gobierno estable, con amplio respaldo ciudadano capaz de impulsar políticas que han llevado a nuestra comunidad, se diga lo que se diga, a una situación de privilegio en el conjunto de España".
