Miles de personas exigen en Bilbao poner "freno" a la destrucción de empleo y a la "impunidad" para la patronal

Actualizado: jueves, 21 mayo 2009 20:30


BILBAO, 21 May. (EUROPA PRESS) -

Miles de personas secundaron hoy en Bilbao la convocatoria de huelga general de los sindicatos nacionalistas (ELA, LAB, STEE-EILAS, ESK, HIRU y ENHE) para exigir que se ponga freno a la destrucción de empleo y la "impunidad" de la patronal y el capital, y advertir de que, "mientras los gobiernos den a la patronal todo lo que quiere", el diálogo social estará "vacío".

La manifestación partió pasadas las doce del mediodía de la Plaza Moyúa de Bilbao, encabezada por una pancarta con el lema "Langileok eredu ekonomiko eta sozial justuaren alde borrokan (Los trabajadores en lucha por un modelo económico y social justo). Contra el chantaje patronal", que portaban los secretarios generales de ELA, Adolfo Muñoz; LAB, Ainhoa Etxaide; STEE-EILAS, Arantza Fernández de Garaialde; ESK, Patxi Agirre; HIRU, Patxi Agirre; y EHNE, Ainhoa Iturbe. Abrían la marcha cuatro tractores y un camión de HIRU.

Durante la manifestación, que transcurrió por la Gran Vía, se escucharon gritos de "Contra el capital, huelga general", "La crisis actual que la pague el capital", "Ez, ez, ez, despidorik ez" y "Banca y patronal, alianza criminal". La marcha concluyó minutos antes de la una de la tarde frente al Sagrado Corazón, donde los representantes de los sindicatos convocantes intervinieron en un mitin.

El secretario general de ELA, Adolfo Muñoz, quien calificó la huelga de "éxito", denunció que las administraciones "buscan coartadas como que la crisis es global para eludir su responsabilidad" y evitar que "se juzguen" las políticas que han hecho, a la vez que aseguró que convocar una huelga general es "muy sano" porque "obliga a socializar problemas, remueve conciencias y centra responsabilidades".

Muñoz censuró que las administraciones "no quieren rectificar porque no quieren enfrentarse al poder económico", así como que "aquí se destruye mucho más empleo que en Europa y no explican la razón" y la existencia de un empleo "con muy baja protección social". También criticó que no hay políticas de solidaridad "porque han elaborado una fiscalidad injusta en beneficio de los ricos" y reducido el gasto social "a la mínima expresión".

Tras asegurar que "sí hay dinero público, pero para la banca y las empresas", denunció que la patronal, "desde el privilegio de saberse apoyada por los gobiernos, chantajea las condiciones de trabajo, pretende reducir salarios, incrementar jornadas y flexibilidad, aprovechando el miedo para sacar ventaja, mientras "el déficit y la pobreza aumentan".

Muñoz explicó que los sindicatos convocantes hacen la huelga general "convencidos de que esta crisis o tiene una salida solidaria o nuestra gente lo va a pasar muy mal, porque los gobiernos no están haciendo nada para que sea solidaria".

En ese sentido, detalló que en su "agenda sindical y social" incluyen la pretensión de "condicionar la política de los gobiernos para hacer políticas sociales", así como poner en evidencia "el vacío espectacular en las propuestas gubernamentales" y decir a la patronal "que no aceptamos chantajes, que los salarios no son responsables y que los vamos a defender".

DIALOGO SOCIAL

Muñoz aseguró que "el diálogo social es dinero para dormir al sindicalismo" y criticó que "mientras los gobiernos den a la patronal todo lo que quiere, el diálogo social estará vacío". Asimismo, advirtió de que el Gobierno vasco, "el nuevo y el anterior", quieren extender el modelo de diálogo social "vacío" de Navarra "valiéndose de la minoría sindical" y "desactivando" el sindicalismo, "lo que no vamos a aceptar".

En ese sentido, criticó la ausencia de medidas "que afecten al poder económico" y reiteró que con la huelga general de hoy exigen "poner freno a la destrucción de empleo, estabilidad laboral, trabajos dignos, eliminar discriminaciones, eliminar el fraude en la contratación laboral, justicia fiscal y perseguir el fraude fiscal, incrementar el gasto social, un salario social digno y poner un control público en las finanzas". "Los gobiernos pueden, pero no quieren y la patronal lo sabe y está cómoda", añadió.

Muñoz advirtió de que el Gobierno "ha empezado una cruzada de manipulaciones y mentiras, porque no tienen argumentos sostenibles para responder a lo que el movimiento sindical está planteando" y señaló la necesidad de "trabajar juntos" en las empresas y en la sociedad para hacer frente "al chantaje de la patronal" y porque "no nos pueden mover de la línea que tenemos trazada".

Frente al objetivo de la patronal de "destruir empleo digno y sustituirlo por precario, de liquidar derechos y conseguir la paz social y un sindicalismo dócil", el responsable de ELA dijo que "no les vamos a dar paz social, el sindicalismo tiene que tirar, en las empresas y en la sociedad".

LAB

En su intervención, la secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, aseguró que la huelga es el mayor acto de "solidaridad, de conciencia de clase y responsabilidad sindical" que se podía hacer ante una crisis "como la que se nos ha venido encima".

"Y lo hemos hecho bien, a pesar de una ofensiva donde se ha manipulado, se ha intoxicado, se ha mentido, amenazado y chantajeado para desactivar la convocatoria y neutralizar nuestra capacidad de respuesta", señaló.

En este sentido, aseguró que "no sólo han fracaso en su intento, sino que le han dado "más valor" a la convocatoria y a la decisión de secundar la huelga y salir a la calle. "Esto es lo único que han conseguido", agregó.

Además, Etxaide recalcó que, quienes han pretendido frenar la huelga, "saben que la economía no mejora destruyendo empleos, ni condenando a vivir bajo el umbral de la pobreza a los pensionistas, ni obligando a las mujeres a trabajar sin derechos".

"Lo que sí mejora es su cuenta de resultados porque ahora, que acaban de destruir 40.000 puestos de trabajo, se acaban de repartir más de once mil millones de euros en dividendos y acciones", denunció.

En esta línea, la secretaria general de LAB destacó que en Euskadi "no falta dinero, sino que sobran ladrones y políticas que avalan a esos ladrones".

Por su parte, el secretario general de ESK, Josu Balmaseda, explicó que tras un año de crisis, "hay que decir basta ya de impunidad para la patronal y para el capital" y pidió que se lleven a cabo reformas fiscales para "redistribuir" la riqueza.

Además, aseguró que la crisis "va para largo" y señaló que el camino para combatirla es la "lucha" y solicitó que se "incremente" la inversión pública para la renta básica de quienes se han quedado en el paro "por culpa de la crisis". "Y si tiene problemas la banca, que la nacionalicen", agregó.

Durante su intervención, el secretario general de Hiru, Patxi Aguirre, advirtió de que no están "dispuestos" a "renunciar" a sus derechos, ni van a "pagar" una crisis que "no" han provocado.

"En este viaje no vamos a ser burros de carga. Nosotros, a partir de hoy, seremos los protagonistas y decidiremos dónde vamos, cómo vamos y cuándo vamos hacia un nuevo modelo económico y social", advirtió.

El acto que cerró la manifestación concluyó a la una y media de la tarde, con los manifestantes entonando 'La Internacional' en euskera, así como el 'Eusko Gudariak'.