Millet.- Los contables del Consorci ratifican la doble facturación

Actualizado: viernes, 9 abril 2010 16:56

Algunos talones debían pagarse tan rápido que una empleada incluso se cayó por las escaleras

BARCELONA, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -

Dos de los contables del Consorci del Palau de la Música, David Regalada e Isabel Rodríguez, que declararon hoy ante el juez Juli Solaz en relación al presunto desfalco de más de 35 millones de euros de la institución, ratificaron el sistema de doble facturación que utilizaba la entidad.

Así, según explicaron fuentes jurídicas, una parte de las facturas seguían un proceso ordinario, es decir, se efectuaban pagos una vez al mes y las facturas iban firmadas por el responsable del departamento en cuestión y por Jordi Montull. Las demás, presuntamente usadas para desviar fondos, debían abonarse de forma inmediata, e iban firmadas únicamente por Montull.

Según las mismas fuentes, la mayoría de la facturación de las empresas NewsLetter y Letter Garphic, entre otras, se pagaban mediante el sistema extraordinario. Al ser preguntados, los empleados no supieron explicar si estas empresas habían realizado algún trabajo de forma efectiva. Los responsables de estas sociedades testificaran el día 19.

En una ocasión Montull requirió un talón millonario al portador con tanta urgencia que una de las empleadas se cayó por la escalera cuando lo bajaba al despacho de Félix Millet, donde se habían reunido, explicaron.

Los testigos, que coincidieron de nuevo en manifestar que recibían todas las órdenes directamente de Gemma Montull, también fueron preguntados sobre las facturas de las obras fuera del Palau. En concreto, en una de ellas olvidaron borrar una parte de la dirección de un domicilio privado de Millet, donde presuntamente se realizaron las obras tapadas bajo aparentes reformas en la institución.

Pese a que la situación y el sistema de pagos ya era presuntamente irregular antes de que llegara Gemma Montull, la forma de actuar cambió, ya que con anterioridad al 2003 se realizaban pagos mediante sobres en efectivo, mientras que posteriormente empezaron a utilizarse las facturas presuntamente falsas.

En una ocasión el ex tesorero Enric Álvarez --también imputado en el caso-- aseguró, mientras firmaba un cheque del que desconocía su procedencia, que al final todos iban a acabar en la cárcel.

La última en declarar hoy fue Marta Bas, jefa de mantenimiento, a la que se le solicitó que distinguiera qué facturas formaban parte del mantenimiento del Palau y cuales no. En total, cuatro nuevos testigos que se suman a los de ayer, a la espera que el día 30 declaren las dos esposas de Millet y Montull.