MADRID 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Ejecutivo, a través del director del Gabinete del presidente del Gobierno, Jorge Moragas, dará cuenta el próximo martes en el Congreso de la Estrategia de Seguridad Nacional 2013 que el Consejo de Ministros aprobó el pasado 31 de mayo.
Moragas comparecerá en la Comisión Constitucional de la Cámara Baja para explicar este documento, que cuenta con el respaldo político del PSOE --que incluso ha participado en la redacción del texto--, que revisa la estrategia aprobada por el anterior Gobierno, actualiza el catálogo de riesgos y amenazas a los que se enfrenta España.
A la lista de conflictos armados, terrorismo, crimen organizado, inseguridad económica y financiera, armas de destrucción masiva, ciberamenazas, migración no controlada, vulnerabilidad energética, emergencias y catástrofes que contemplaba el texto, se suma ahora el espionaje y la vulnerabilidad del espacio marítimo.
En cuanto al terrorismo, la estrategia recuerda que en España ha sufrido "más de 50 años la crueldad y la sinrazón del terrorismo de ETA" y señala que la "madurez" de la sociedad española, la unidad de los partidos, la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Esado y de los servicios de inteligencia, así como el trabajo de jueces y fiscales y la cooperación internacional han conseguido "imponerse a las amenazas de la banda terrorista".
EL GOBIERNO NO BAJARÁ LA GUARDIA ANTE ETA
"La fortaleza del Estado de Derecho, la solidez de las instituciones y la eficacia de las acciones implementadas han derrotado a ETA, sin perjuicio de que la democracia siga actuando y no baje la guardia hasta conseguir la disolución de la banda", añade.
El documento señala que la inestabilidad económica es una amenaza "no sólo para la conflictividad política y social que genera, sino también porque alimenta y refuerza otros riesgos existentes" y que aunque los factores que la provocan son "muy heterogéneos, su origen está en "desequilibrios macroeconómicos o de los mercados, actuaciones ilegales o el deficiente funcionamiento de los organismos supervisores".
El informe también explica que las grandes prioridades estratégicas de España son Europa --"las incertidumbres sobre la integración política y económica debilitan considerablemente la UE"-- y el Mediterráneo, del que sitúa al Magreb como región de "particular interés para España", y fija tres zonas vitales en las tres próximas décadas: el Sahel, el Cuerno de África y el Golfo de Guinea.
Al igual que el texto aprobado por el anterior Gobierno, el nuevo se refiere también a Gibraltar como "una anomalía en la Europa de hoy y una disfunción en las relaciones entre dos países socios y aliados", que plantea a España y a Europa "problemas de seguridad en diversos ámbitos" y que requiere de soluciones "eficaces" que deben buscarse de acuerdo con los parámetros establecidos por la ONU y plasmados en la Declaración de Bruselas de 1984 acordada por los gobiernos español y británico.
ACCIONES LIMITADAS EN CONFLICTOS ARMADOS
Respecto de la amenaza concreta de los conflictos armados, el texto señala que, a corto plazo, la crisis y su impacto en los presupuestos de Defensa en Occidente puede llevar a "una mayor renuencia a las intervenciones militares" y, aunque reconoce que "serán inevitables", explica que la tendencia es "que sean acciones limitadas".
A pesar de la crisis, indica que España "debe mantener una capacidad defensiva propia, creíble y efectiva", y subraya que el "objetivo" de la Defensa Nacional es "hacer frente a los conflictos armados que se puedan producir como consecuencia tanto de la defensa de los intereses o valores exclusivamente nacionales --en los que intervendría de manera individual--, como de la defensa de intereses y valores compartidos" en virtud de su pertenencia a la ONU, la OTAN y la UE.
Además de aprobar esa estrategia, el Consejo de Ministros acordó crear el Consejo de Seguridad Nacional, que preside el presidente Mariano Rajoy cuando no asista el Rey, y que tiene entre sus primeras tareas la de presentar en el plazo de seis meses un anteproyecto de ley orgánica de Seguridad Nacional, y también aprovechó para designar a la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría nueva coordinadora de política económica en ausencia del jefe del Ejecutivo.