Cree que la propuesta de Ibarretxe es un "regalo" para la precampaña del PP
BARCELONA, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
El primer secretario del PSC, José Montilla, aseguró hoy que actitudes como la quema de fotografías de los Reyes hacen "mucho daño" a los catalanes porque son utilizadas por el PP, "la derecha más reaccionaria", para atacar a Cataluña.
En su discurso de proyecto político durante el Consell Nacional del PSC, aseguró que algunos "de manera inconsciente" ayudan a dar una "visión de Cataluña que no se corresponde".
"Cataluña tiene poco que ver con unos centenares de personas quemando fotos del Rey", afirmó el líder socialista, que añadió que la mayoría de los catalanes "se sienten muy lejos de estas actitudes y no se reconocen de ninguna de las maneras".
Cataluña --dijo-- "siempre ha reconocido el papel del Rey" en la transición y en la llegada de la democracia y su defensa en el golpe de Estado del 23-F. Por ello, apostó por situar esta "polémica en su justo término", porque son acciones "minoritarias, condenables, rechazables y que ayudan a los enemigos de Cataluña".
Montilla consideró que también hay otras iniciativas, como la propuesta del lehendakari, Juan José Ibarretxe, de convocar una consulta popular el 25 de octubre de 2008, que "no ayudarán" a Cataluña. Para el primer secretario del PSC, la iniciativa de Ibarretxe "es un regalo" para la precampaña del PP.
En este sentido, reiteró que toda defensa del autogobierno y la identidad es "legítima" si se hace "dentro del Estado de derecho, respetando las normas". Si no --subrayó--, "se pierde legitimidad, autoridad moral, y lo único que se hace es debilitar la convivencia".
Para Montilla, estos dos episodios contribuyen al "juego sucio" del PP, que está y estará presente los próximos meses "con más intensidad que nunca" ante la proximidad de las elecciones generales.
Los populares lo harán, según él, "utilizando el terrorismo si hay oportunidad, avivando la guerra de los símbolos, tratando de apropiarse de los símbolos que son de todos de manera tosca y tratando de poner de relieve la falta de cohesión territorial".
El líder del PSC definió como una "vergüenza" la intervención de la portavoz del PP de Andalucía al decir que el tripartito "que se dedicaba a quemar fotos se llevaba el dinero de los andaluces". El PP no tiene "ningún problema en mentir, difamar, distorsionar, enfrentar territorios y generar división", se lamentó Montilla.
DEFENSA DEL ESTATUT.
Emplazó al PSC a comenzar a trabajar de cara a las elecciones generales para mantener la mayoría socialista en el Gobierno, pero también hizo balance del debate de política general y de la acción pasada y futuro del Ejecutivo catalán, con la defensa del Estatut como "horizonte nacional para mucho tiempo".
"No nos paralizará ni amenazará el mal tiempo ni los malos augurios catastrofistas", señaló Montilla, refiriéndose a la gente que "lleva meses alertando sobre lo que se debe hacer si el Tribunal Constitucional recorta el Estatut".
El presidente de la Generalitat aseguró que, pese a la "ofensiva conservadora" en el TC, el Govern será el primero en defender el "autogobierno sin renunciar a nada de lo que el Estatut reconoce". "Que nadie piense que será más exigente que nosotros", exclamó.
Además, reafirmó el compromiso expresado en el debate de investidura para desplegar el Estatut "con ambición, perseverancia, con el ritmo adecuado y la paciencia adecuada", revelándose contra los que "reniegan porque no lo habrían querido nunca y contra aquellos que dicen que es insuficiente".
"Lo defenderemos encarnizadamente, también ante el Gobierno de Madrid cuando sea necesario", aseveró el primer secretario del PSC, que puso como ejemplo de esa voluntad el acuerdo de inversiones en infraestructuras alcanzado por Gobierno y Generalitat, un acuerdo con un volumen de recursos "superior a la primera legislatura después del pacto del Majestic". "Nuestros adversarios se las prometían muy felices", dijo.
COHESIÓN DEL GOVERN EN EL DEBATE.
Montilla subrayó, asimismo, que el debate de política general ha permitido demostrar el "trabajo, los objetivos y la cohesión del Govern" ante el principal partido de la oposición, "que sigue instalado en el desconcierto y es incapaz de reconocer la legitimidad de la mayoría".
El líder del PSC indicó que en los tres días de debate "no se presentó ninguna alternativa estructurada" a la acción del Ejecutivo y, además, se puso de manifiesto que el PP, "después de la defenestración de Piqué", vuelve a su discurso "más extremo".
"La etapa de Piqué ha sido un espejismo", consideró Montilla, que añadió que la derecha más extrema del PP tiene ya "portavoz" en Catalunya en la persona de Daniel Sirera.
El debate, además, ha servido para hacer patente --dijo-- que hace falta "un cierto cambio de mentalidad" superando "falsos dilemas" como libertad-igualdad, identidad-globalización, Barcelona-Cataluña, Cataluña-España y catalán-castellano, ejemplificó. "Necesitamos una Cataluña fuerte, que crea que tiene empuje y liderazgo".
Abogó por abandonar la "Cataluña del lamento y de la queja" a través de la alternativa progresista frente a la "opción conservadora" destinada a mantener la situación actual y a caer en la "decadencia". Esta dicotomía --remarcó-- "molesta" especialmente al presidente de CiU, Artur Mas.
Así, Montilla se declaró partidario de continuar participando del proyecto del PSOE, porque esa implicación "es la forma más eficaz de hacer oír la voz de Cataluña para construir una España federal" frente a la concepción "uniformista que niega la pluralidad", opinó.
Para él, con la oportunidad de expresarse en tres niveles administrativos --Gobierno, Generalitat y ayuntamientos--, los socialistas pueden impulsar su proyecto, pero queda "mucho camino para hacer" y el PP no pondrá las cosas "fáciles".
Montilla aseguró que Cataluña tiene "retos y dificultades", pero la "Catalunya real es la que crece, tiene fuerza y vigor" y no se corresponde con el "desfallecimiento y el pesimismo de algunos líderes políticos".
En este sentido, apostó por seguir estando al frente de los problemas, como ya hizo el Govern durante la crisis de infraestructuras en verano, con un PSC que es el partido "que mejor expresa la complejidad y diversidad de la sociedad catalana".
El líder socialista emplazó a sus compañeros a preparar "con ambición" la Conferencia Nacional del 24 y 25 de noviembre y a añadir sus propuestas al documento de nuevo impulso del socialismo catalán preparado por el viceprimer secretario del PSC, Miquel Iceta.
