1-N.- Montilla hace "temblar" de emoción a una pasajera del Metro en Cornellà en su periplo matinal en trasporte público

Actualizado: viernes, 20 octubre 2006 15:10

El candidato del PSC al superar el torno de entrada y se dio un golpe

BARCELONA, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -

El presidenciable del PSC, José Montilla, abandonó esta mañana el coche oficial e irrumpió en la parada de Metro de la Línea 5 Cornellà Centre para trasladarse hasta la sede del PSC en Barcelona provocando el estupor entre los pasajeros e incluso que a una viajera le "temblaran las rodillas" de "emoción".

Montilla convocó a los medios de comunicación en el exterior de la parada de Cornellà Centre para lanzar su propuesta de mantener abierto el Metro durante toda la noche de los sábados y, a continuación, con cámaras de televisión, fotógrafos, periodistas, una escolta policial de paisano redoblada y miembros de las juventudes del PSC se dispuso a tomar el metro para "ir a trabajar" a la calle Nicaragua de Barcelona.

El revuelo en la estación fue considerable y perturbó a algunos de los viajeros que incluso advertían de que "iban a llegar tarde al trabajo" por culpa de tumulto que perseguía a Montilla y Xavier Casas, primer teniente de alcalde de Barcelona y vicepresidente de la Autoritat del Transport Metropolità (ATM), que le acompañó en todo el trayecto ofreciéndole detalles sobre el convoy.

Mientras unos se quejaban, otros aprovecharon la oportunidad y se 'colaron' instados por algún miembro de seguridad que pretendía aligerar la circulación de personas en los tornos de entrada.

GOLPE DE MONTILLA

Montilla compró su billete en la máquina automática y procedió a introducirlo en el control de entrada. No obstante, se equivocó de lado a la hora de superar el torno dándose un sonoro golpe ante las cámaras de televisión. Una vez rectificada la operación, Montilla accedió a un tren de Metro que esperaba en el andén con pasaje dentro.

No obstante, la cantidad de cámaras, periodistas y miembros de la comitiva socialista era tal que Montilla quedó de pie rodeado y sin acceso a los viajeros. Sólo una pasajera, con el libro 'La ilusión de vivir' en la mano, pidió paso para saludar a Montilla y confesar que le "tiemblan las rodillas" de emoción. Como colofón de una escueta conversación la señora le espetó que "como Cornellà no hay nada" y Montilla replicó "ahora lo haremos para toda Cataluña".

El viaje en Metro, que Montilla ya utilizó este verano "con la familia", se acabó en la estación de Sans-Estació, donde esperaba el coche oficial. El candidato lo rechazó y caminó sin intercambiar palabra con ningún ciudadano hasta la sede del PSC, donde se concentró para preparar el debate de candidatos de esta noche en TV3.

Montilla minimizó la cita y señaló que se trata de "un debate más", convencido de que "no tiene nada de especial". "Tengo otra cosas que hacer además de preparar el debate", aseguró. También aprovechó para considerar "ridículo" que alguien considere que su contrincante, Artur Mas, lleva la iniciativa en la campaña electoral y recordó que "el liderazgo se demostrará en las urnas el día 1 de noviembre y Mas ni lo tiene ahora no lo tendrá el día 1".