MADRID 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, afirmó hoy que la entrada de España en el grupo del G-8 que engloba a las principales economías del mundo llegará "por su propio peso", por lo que instó a no preocuparse ni obsesionarse por lograr este objetivo.
Moratinos presidió junto al presidente del Senado, Javier Rojo, la creación en España del primer Observatorio de Gobierno de la Economía Internacional a cargo de la Fundación de Estudios Financieros (FEF), cuyo objetivo será estudiar anualmente el papel de España en el mundo económico y financiero internacional.
El jefe de la Diplomacia reconoció que es "indudable" que los Gobiernos anteriores han reivindicado la presencia española en el G-8. "Es una reivindicación que este Gobierno mantiene de una manera serena", en base a la "serenidad que aporta la fortaleza y el dinamismo de la sociedad española y de la empresa e inversión española", estimó.
Moratinos opinó que los datos macroeconómicos de España son los que importan ya que colocan a nuestro país en el G-8 "real" a falta de entrar en este grupo "de manera formal".
"La influencia política, económica, financiera, cultural y lingüística es la que hará que tarde o más bien pronto, o cuando se decida, que España forme parte del G-8 real", indicó a los asistentes al acto. Por ello, pidió no preocuparse u obsesionarse con la presencia formal de España en el G-8.
"La presencia llegará por su propio peso y nos reclamarán estar ahí. El compromiso de este Gobierno será hacer todo lo necesario para que el peso político, económico y financiero de España sea reconocido y podamos participar en los distintos foros y organizaciones que influyen y facilitan el mayor dinamismo de la economía y de la sociedad española", señaló.
Moratinos recordó que España integra el grupo de países con economías más abiertas del mundo, con un 69% según los datos de 2005. "La economía española ha triplicado desde 2005 su Producto Interior Bruto y aporta el 2 por ciento del comercio global. Nos convierte en la octava potencia económica del mundo por delante de países que están en el G-8 como es Canadá", hizo hincapié.
El director de este nuevo Observatorio, el decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de Navarra, Luis Ravina, planteó cinco causas en rueda de prensa por las cuales España no forma parte del G-8 ni del G-20, pese a que ello "en modo alguno se corresponde con el peso" de España como nación.
En primer lugar, porque España "ha llegado tarde" a iniciativas como la de este grupo de las economías más importantes del mundo. A ello se suma el que los sucesivos Gobiernos no hayan puesto "excesiva atención" en tener una presencia en organismos internacionales y que este G-8 esté "dominado" por las grandes potenciales mundiales, las cuales consideran "incómoda" la presencia española "al no ser un socio tan fiel" como otros.
En último término, constató la "competencia" de países como Holanda o Bélgica, que aunque tienen economías menos importantes que la española, ocuparon una posición internacional después de la Segunda Guerra Mundial que no tuvo España y ahora disponen de una mayor presencia de funcionarios en instituciones económicas como el Banco Mundial.
En su posterior intervención en el acto, Ravina se quejó de la "muy escasa y muy pobre" representación privada española en foros de debate en el seno de la Unión Europea, en contraposición a los hábitos de empresas de Reino Unido, Francia o Alemania, por ejemplo, en un momento en el que España es la octava economía del mundo en PIB, la sexta por comercio internacional, la cuarta por inversión directa fuera del país y también la cuarta economía del mundo con mayor grado de liberalización económica.
Además, explicó que el Observatorio de Gobierno de la Economía Internacional analizará periódicamente la "calidad institucional" en España, el tamaño de su economía, así como la proyección española en temas socioculturales y la presencia en organismos internacionales.
El objetivo de este nuevo Observatorio es abrir delegaciones en Washington, Londres y Bruselas para dar a conocer la situación económica de España a nivel internacional. Los trabajos de investigación con un grupo de trabajo que estará asesorado por otro de consulta, en el que participarán --entre otros, según adelantó-- los ex presidentes de Gobierno Felipe González y José María Aznar.