PALMA DE MALLORCA 30 May. (EUROPA PRESS) -
El Parlment aprobó hoy instar al Gobierno central a reformar la Ley de Arrendamientos Urbanos de manera que desde el Estado se regule el uso turístico de alquileres residenciales, ya que, según sostuvo el Grupo Popular, en estos momentos esta clase de oferta escapa de un control adecuado por parte de la Administración, lo que afecta de forma negativa a la seguridad de los turistas que se decantan por esta modalidad.
Con 28 votos a favor y 24 abstenciones, el Parlament aprobó la Proposición No de Ley presentada por el PP con el objetivo de modificar una Ley que, a juicio del dipuado Joan Font, ampara los usos turísticos de alquileres privados, imposibilitando un control "apropiado" de esta oferta de alojamiento.
Para Font, el problema radica en que la Consellería de Turismo no puede regular estos alquileres "de temporada" potenciados por los cambios de uso en la demanda porque "no son propiamente alojamentos turísticos", por lo que reiteró la necesidad de "reformar la Ley modificando la tipificación de los derechos de usuarios y propietarios".
Una iniciativa que contó con el respaldo del diputado del Grupo mixto, Miquel Nadal, quien introdujo que la reforma de la Ley de Arrendamientos Urbanos debería servir para regular "no sólo el alquiler de uso turísticos, sino el resto de usos de la oferta de alquiler".
Así, Nadal consideró que ante el incremento del 300 por ciento del precio medio del metro cuadrado en España entre1995 y 2005, y teniendo en cuenta que sólo el 7 por ciento de la vivieda en el conjunto del Estado está en régimen de alquiler, consideró "necesario" modificar la Ley para solucionar una problemática que la ciudadanía percibe como "muy importante".
Sin embargo, el diputado del PSIB, Celestí Alomar, consideró que esta inciativa del PP responde a las presiones que está recibiendo el Govern por parte de las empresas turísticas porque el turismo residencial supone una competencia desleal con el resto de modalidades turísticas tardicionales. Sin embargo, Alomar declinó dar apoyo a la Proposición al estimar que esta problemática debe ser abordada desde la Comunidad Autónoma, en lugar de derivar el problema la Estado.
Asimismo, el diputado de EU/Els Verds, Miquel Rosselló, señaló que, sin lugar a dudas, la ordenación de los usos turísticos residenciales es una temática de "importancia caudal", aunque criticó la "poca claridad" de la propuesta, que finalmente, calificó de "ir en favor al suelo", por lo que us voto fue de abstención.
Finalmente, la diputada del PSM, Maria Antonia Vadell, criticó las "escasa definición de las intenciones del Govern" al querer resolver un problema que "creó el mismo PP", el "verdadero impulsor del turismo residencial". Aun así, consideró que una reforma de la Ley de Arrendamientos puede ser una "buena solución" para dar dalida a la "barbaridad" de viviendas vacías que hay en las islas, que según Nadal, son más de 30.000 sólo en Palma.