También dice que "estaba escrito" que el proceso de paz iría "mal", por dar la sensación de que "todo estaba pactado"
MADRID, 18 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Comité Federal del Partido Comunista de España (PCE) aprobó hoy un documento político elaborado por su secretario general, Francisco Frutos, en el que afirma que el nuevo gobierno tripartito de Cataluña "no sale reforzado de las urnas, sino debilitado", al tener menos votos y menos diputados. Además, asegura que los análisis no deben ser triunfalistas, ni en relación al nuevo gobierno, ni en lo que afecta a ICV-EUiA, si bien se muestra de acuerdo con la posición del PSUC de apoyar al tripartito.
En este sentido, el documento, que recibió 83 votos a favor, 5 en contra y 3 abstenciones, alerta de que la próxima etapa en Cataluña será "más conflictiva" y el PP puede "sacar tajada de ella". "Montilla, el PSC, el conflicto real entre PSC y PSOE, el posible conflicto con CiU, van a crear nuevas reglas del juego en la vida política y parlamentaria. IU no puede convertirse, si no lo es ya, en un elemento anecdótico de la situación, sino intentar convertirse en una alternativa identificable para mucha gente de izquierdas", añade.
Afirma, eso sí, que Joan Saura ha sido el único candidato que no ha dado "espectáculo gratuito", mientras que la imagen de otros componentes del tripartito ha sido, "en algunos casos, esperpéntica". En cualquier caso, insiste en que ahora el tripartito tiene una segunda oportunidad, por lo que no debe olvidar que "el cartero no llama más de dos veces".
"Apoyar el Tripartito tiene una explicación, además, relacionada con dos retos: demostrar que si el centro-izquierda aprende de sus errores y los corrige es capaz de dar un giro social a la política. Este es el primer reto. El segundo, en la línea de la legitimidad democrática de un acuerdo, que deja al partido más votado en la oposición, intentar integrar a la acción política y de gobierno en Catalunya y en el resto de España a un partido que defiende la independencia para Catalunya", argumenta.
PROCESO DE PAZ
En referencia al proceso de paz, el PCE afirma que está "estancado, va mal" e incluso se atreve a decir que "estaba escrito que así fuera, puesto que no se puede hacer un proceso de paz al revés, dando la sensación de que todo está pactado". Así, señala que el proceso debía haberse fundamentado en el fin de la violencia, "con los presos en la calle en un proceso negociado y con la posibilidad de que Batasuna, o quién sea, defienda sus ideas, sean éstas la independencia, o la unidad de Euskadi".
En su opinión, ahora no hay otra cosa que negociar, ya que con el terrorismo hay que tener claro que hay que optar por "negociación de paz por presos y libertad para defender todas las posiciones política y pacíficamente, nada más".
Asimismo, plantea que si alguien piensa que ETA, en el corazón de la "comunidad más rica" de España, tiene algo que ver con el Frente Sandinista o con el movimiento de liberación palestino es que no es capaz de "discernir entre la legitimidad de la violencia frente a la opresión y el independentismo de los ricos".
Eso sí, el PCE deja claro que sigue apoyando el proceso de paz, si bien puntualiza que se ha planteado mal y que será difícil rectificar. "No puede continuar en buenas condiciones si el cese de fuego indefinido no se convierte ya en una abandono total de las armas y en la aceptación de la lucha política. Exactamente igual que hacemos nosotros en nuestra lucha por el socialismo", explica.
CORRUPCIÓN
Por otro lado, también lamenta que la corrupción "generalizada" en España se haya dejado incubar dentro de un crecimiento económico de carácter especulativo, al tiempo que destaca que es una "inmoralidad" todo lo que está ocurriendo con las diversas opas, compras, ventas y fusiones, especialmente en los sectores de la energía, de la construcción y el bancario, donde "miles de millones de euros se ventilan de un lado a otro sin crear ninguna riqueza real sólida, ni ningún puesto de trabajo".
En opinión del partido, en la construcción se está "recreando, fortaleciendo, manteniendo" un tipo de crecimiento económico fundamentando en la especulación del suelo, de la vivienda y de los créditos. Así, mantiene que la lucha contra la corrupción urbanística y por el derecho a una vivienda digna, "sin que ésta deba ser necesariamente en propiedad, son una misma cosa".
POLÍTICAS SOCIALES DE IZQUIERDA
En cuanto a la situación política española, para el PCE el carácter liberal del programa económico y social del PSOE "imposibilita un giro a la izquierda". Como reflejo de esto, cita las huelgas que se están produciendo en la atención sanitaria primaria o las movilizaciones en defensa de la educación pública.
El PCE apuesta por unas políticas sociales de izquierda que respondan a las "necesidades reales" de la gente, que, a su juicio, son "incompatibles con la liberalización de la que se vanagloria el Gobierno, bajando los impuestos y recortando el presupuesto para conseguir un superávit público, mientras empeora toda la estructura pública del país y se acostumbra al los ciudadanos a que se privaticen gradualmente los servicios".
El informe destaca, además, cómo se están destruyendo puestos de trabajo, reduciendo los estables y creando empleos precarios, y cómo se está fomentando la individualización de las relaciones laborales y la desorganización social, generando la penalización de toda la estructura productiva. Frente a todo esto el PCE defenderá el empleo "digno y estable, la igualdad de derechos de todos los trabajadores y trabajadoras".
IU
En lo que tiene que ver con la actitud de Izquierda Unida (IU), el PCE mantiene, como en anteriores ocasiones, que sólo sería posible mejorar su situación proyectando y defendiendo un programa político centrado en los principales asuntos que interesan y afectan a la gente, uniéndolo a las políticas "de fondo" que la izquierda debe defender. Por tanto, apuesta por incidir en la naturaleza de la coalición como movimiento de carácter político y social, fomentando políticas alternativas de izquierdas.
POLÍTICA INTERNACIONAL
El documento de Frutos también hace una serie de menciones a la política internacional, sobre las que destaca el apoyo a la causa palestina frente a los "asesinatos" de Israel y la actitud de Estados Unidos, que "impide" a la ONU realizar una condena de los "atentados". Sobre Irak, afirma que los 600.000 muertos desde el inicio de la guerra, más los casi 3000 muertos norteamericanos, está causando en el mundo y en EE.UU. "un contundente impacto, agrandado aún más por el cinismo de Bush y de todos los caciques de la Casa Blanca, del Pentágono y de los negocios".
Por tanto, agrega que tanto George Bush como el primer ministro británico, Tony Blair, están "en la cuerda floja de la degradación ética y política", y se pregunta "qué queda del triunfalismo de Bush, Blair, Aznar y el PP, salvo muerte, destrucción, más odio y más terrorismo". "Esta es la lección que debemos extraer de la realidad. Y acompañarla de más convicción todavía en la movilización de las conciencias y de las personas", asegura.
Para concluir, el PCE denuncia la actuación "represiva" del gobierno conservador mexicano en Oaxaca y expresa su solidaridad con los trabajadores y trabajadoras que luchan por sus derechos. Además, saluda la victoria del Frente Sandinista en Nicaragua, al tiempo que manifiesta su intención de mantenerse alerta ante las "maniobras que el imperialismo" realiza para abortar las "justas aspiraciones de los pueblos de América Latina por su soberanía, independencia, desarrollo social y unidad".
