PNV lo cree "decepcionante" al hacer una defensa "extrema de lo que ya tenemos, que no lleva a ninguna parte"

Aitor Esteban
EUROPA PRESS
Actualizado: viernes, 25 diciembre 2015 13:07

BILBAO, 25 Dic. (EUROPA PRESS) -

Afirma que el Rey "no se da cuenta de que hay ciudadanos que no sienten ningún apego al sentimiento de españolidad"

BILBAO, 25 (EUROPA PRESS)

El diputado electo del PNV en el Congreso Aitor Esteban ha calificado de "decepcionante" el mensaje navideño de Su Majestad el Rey Felipe VI, al usar la "táctica" de hacer una "defensa extrema de lo que ya tenemos, lo que no lleva a ninguna parte".

En una comparecencia en Sabin Etxea, Esteban ha recordado que el mensaje fue transmitido desde el Palacio Real, donde el Rey habló de "la grandeza de España, de que era un lugar para todos los españoles y que estaba abierto a todos los españoles para comprender su pasado", y se ha preguntado si el Monarca "conoce exactamente" cuál es el pasado del Estado español y la historia de los pueblos y naciones que forman en este momento parte del territorio del Estado español.

El dirigente nacionalista ha destacado que Felipe VI habló de "tópicos redundantes como gran nación con una lengua común, de ser y sentirse español, sin darse cuenta de que hay ciudadanos en algunos lugares del Estado, y es recurrente que esto se muestre en las elecciones, que no sienten ningún apego a ese sentimiento de españolidad".

Asimismo, ha manifestado que en el mensaje navideño el Rey habló de "un gran Estado, pero no habló de un Estado que esté en crisis constitucional, por una parte, pero también económica y de comportamientos en lo político y lo público".

MENSAJE "ALARMISTA"

En su opinión, si se unen las expresiones que utilizó el Rey, lanzó un "mensaje alarmista como si fuese a acabarse el Estado, hablando se fortalecer nuestra cohesión nacional, confianza en la continuidad de España...". Con este mensaje, a su entender, el monarca estaba lanzando un "catenaccio constitucional o nacional".

Según ha indicado, "todos entendimos que nombró a Cataluña pero no se atrevió y no tuvo el coraje de mencionarla con su nombre, habló de que no se puede imponer la voluntad de unos sobre otros, pero no habló de 'vamos a resolver esto con diálogo', sino que se refirió a la ley y a la Constitución y a la inmovilidad de esos textos".

En esta línea, ha apuntado que en un momento en el que se está hablando por parte de diferentes fuerzas políticas de reforma constitucional, con el problema catalán, el problema nacional vasco, "que están ahí, con un cuadro diferente que han dejado las últimas elecciones, creemos que lo que tenía que haberse tomado es más como un reto y una oportunidad para solucionar problemas porque obliga al diálogo, más que la sensación del mensaje que estaba transmitiendo como una especie amenaza que llamó a esa especie de protección, de catenaccio constitucional".

Tras insistir en su "decepción" por el mensaje, ha destacado que éste no trasmitió "visión de futuro y esperanzas de futuro, sino que se estuvo refiriendo a mensajes comunes y de una manera más insistente incluso que lo que nos tenía acostumbrados los mensajes de su padre".

SIN INNOVAR

Aitor Esteban ha criticado la "defensa de todo y no innovar". "Las elecciones han dado un panorama político abierto en el que es posible, si es que hay voluntad, abordar retos que hasta ahora han estado digamos en una esquina, y el mensaje que lanzó es: vamos a hacer una defensa extrema de lo que ya tenemos, no vamos a arriesgar, no vamos a jugar".

Frente a esto, ha considerado que es momento de hacer un "juego bonito, porque quizás de esa manera podemos solucionar temas". "Si realmente le preocupa el Estado y la continuidad del Estado, el cerrarse en la defensa no lleva a ninguna parte", ha advertido, para instar a tomarse la situación tras las elecciones "más como una oportunidad que como una amenaza".

"Esperábamos otro discurso. Es muy importante lo de comprender el pasado ¿lo comprenden en la Casa Real o se han quedado con manuales de historia de determinada época?", se ha preguntado, para asegurar que "es una oportunidad también para la Monarquía si sabe leer inteligentemente los tiempos". "Desde luego, del discurso de ayer no me queda la sensación de que eso estuviese ocurriendo", ha concluido.

Leer más acerca de: