PNV no criticaría una reunión de "toma de temperatura" entre Gobierno y ETA porque es "casi una obligación"

BILBAO, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -

El portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, aseguró hoy que no criticaría una reunión entre el Gobierno central y ETA o entre representantes socialistas y de la banda, como la que se podría haber producido hace un mes según informaciones publicadas por rotativo, "siempre y cuando" sirviera para "tomar la temperatura" de la banda armada, algo que consideró "casi una obligación".

Por otro lado, en cuanto a la reacción de ETA a la consulta que plantea el lehendakari, Juan José Ibarretxe, reconoció que la organización terrorista es "poco permeable" a las demandas sociales de paz, pero remarcó que las iniciativas del presidente del Gobierno vasco pueden contribuir a "arrinconar y deslegitimar" a los terroristas.

En el caso de la hipotética reunión de miembros del PSE-EE y de ETA, señaló que ésta no tiene constancia de que se haya producido. "Tampoco me extrañaría que se hubiera realizado aunque, aquí, cada uno cumple su papel y, evidentemente, el Partido Socialista, con las cosas como están, con la coyuntura política en los términos en los que está, va a negar absolutamente ese encuentro", agregó.

Erkoreka dijo que, "desde luego, no criticaría la existencia de ese encuentro si realmente lo hubiese habido, siempre y cuando se hubiese orientado a mantener un canal de comunicación, que creo yo que es bueno mantener siempre, aun en los peores momentos, para esto que históricamente se dice 'tomar la temperatura', llámesele así o llámesele de otra manera".

En este sentido, reiteró que "mantener un canal de comunicación que nos permita saber como está latiendo el corazón del otro lado" supone "casi una obligación de todo Estado democrático".

En cuanto a la consulta a la ciudadanía propuesta por el Gobierno vasco, el portavoz jeltzale en el Congreso cree que, aunque "ETA, como hasta ahora, sea poco permeable a las demandas de la sociedad", el conjunto de iniciativas que "está impulsando el lehendakari" sí puede tener "un efecto perjudicial" para la banda, "en la medida en que contribuyen a arrinconar a ETA, a deslegitimarla más".

Para Erkoreka, la hoja de ruta de Ibarretxe puede hacer realidad "lo que más le puede fastidiar" a ETA, ya que demostraría que "los conflictos políticos" se podrían "no ya resolver", pero, "aunque sea encauzar sin su concurso, sin su comparecencia".

"Nadie espera de ellos una aportación real a eso y se les demuestra que son irrelevantes, políticamente no contribuyen en nada y nadie espera de ellos una aportación real. Somos capaces de encauzar estos problemas políticos sin el concurso, sin la presencia, sin la presión de ETA", enfatizó.

Preguntado por los apoyos sociales de la propia banda, aseguró que los diversos procesos de paz que se han ido intentando "siempre" causan efectos positivos entre los que se incluye "la reduccción de apoyos" a la banda por su "incapacidad" de renunciar a postulados "dogmáticos" y de "apostar por la democracia".

Asimismo, en cuanto al último intento de proceso, rechazó las acusaciones de la izquierda abertzale sobre la culpabilidad del PNV y del Partido Socialista en su fracaso. "La hora de la verdad fue cuando a Batasuna le tocó plantar cara a ETA, fueron incapaces de levantar la voz ante ETA", dijo.

PRESUPUESTOS

Por otro lado, en referencia al apoyo del PNV a los Presupuestos Generales del Estado pese a las diferencias políticas, recordó que los partidos políticos con responsabilidades de gobierno deben "conciliar lo que es el debate político en una sociedad como la vasca con tan heterogéneos sentimientos de identidad, incluso un debate desabrido, abierto, enfrentado" con la responsabilidad institucional para lograr acuerdos económicos en "ámbitos en los que están en juego intereses directos de los ciudadanos, de los empresarios, la estabilidad económica".

El portavoz jeltzale añadió que esta responsabilidad es mayor en el momento actual porque "podemos estar a las puertas de un estancamiento económico que podríamos acusar los ciudadanos, en baja de servicios, en baja de disponibilidad de recursos".

En cuanto a la propuesta del presidente del PNV, Josu Jon Imaz, de "relativizar" el soberanismo, Erkoreka aseguró que se trata de un concepto que "está en tesitura cambiante" porque los estados "se aferran formalmente a ella" al considerarla "el último resquicio" para seguir siendo "algo en el orden internacional". "Pero al mismo tiempo estamos viendo que la soberanía se les escapa a chorros", agregó.

Asimismo, destacó que su formación aspira para el País Vasco a un estatus "equiparable al que en este momento tienen los estados teóricamente independientes, que son menos independientes cada vez".

Sobre la Asamblea y la consiguiente renovación de la cúpula del PNV, confió en que de ésta surgirá un partido "capaz de gestionar la pluralidad interna y perfectamente capaz también de actuar con coherencia de cara al exterior".

Por último, aseguró que el nuevo EBB será el encargado de marcar la estrategia del PNV en el Congreso y Senado y, por tanto, de decidir los apoyos para la futura elección del nuevo presidente del Gobierno central, sobre la que, de momento, "no hay decisión formal definitiva".