MADRID, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Brigada de Policía Judicial de Barcelona analizó en un informe y aportó al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) un total de 8 horas de grabación de las intervenciones policiales en una veintena de centros de toda Cataluña durante el 1-O, un total de 66 vídeos realizadas por agentes con cámaras 'GoPro' colocadas en sus cascos.
Los datos han sido ofrecidos por los dos responsables de este informe, que han comparecido este martes como testigos ante la sala que juzga el 'procés' independentista en el Tribunal Supremo. A pesar del intento inicial del fiscal Javier Zaragoza, la protesta de las defensas ha obligado al presidente del Tribunal, Manuel Marchena, a intervenir para evitar que los agentes pudieran realizar una intervención valorativa de su trabajo.
Los agentes, según su testimonio, se limitaron a analizar y extractar lo que se veía en las grabaciones, que fueron volcadas en un dispositivo informático por agentes de la Policía Científica.
Este departamento también fue responsable de elaborar un anexo con los fotogramas con lo más representativo de las imágenes, lo que no quiere decir que los analistas no vieran todos y cada uno de los vídeos y distinguieran entre ellos aquello que consideraron más relevante para la investigación, según han señalado a preguntas de varios de los abogados de las defensas.
LA DEFENSA SUGIERE BORRADOS
Por su parte, el abogado Jordi Pina, que respresenta al que fuera presidente de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) Jordi Sánchez y a los exconsejeros Jordi Turull y Josep Rull, se ha interesado en ambos interrogatorios por un vídeo en particular que duraba tan sólo unos segundos, sugiriendo la posibilidad de que parte de su contenido hubiese sido borrado. La pregunta ha sido protestada por parte de la abogada del Estado, Rosa María Seoane.
A este respecto, los testigos se han limitado a señalar que ellos analizaron todo el material que les fue suministrado por la científica, mientras que uno de ellos ha añadido que su análisis no podría determinar si existe alguna manipulación.
Tampoco han podido determinar los testigos, uno de los cuales, ya jubilado, fue comisario de la Brigada de Policía Judicial de Barcelona, por qué no se entregó para su análisis ningún vídeo sobre las intervenciones policiales en colegios electorales de Tarragona y Lleida, una cuestión sobre la que preguntó Benet Salellas, uno de los abogados del presidente de Omnium Cultural, Jordi Cuixart.
Sobre contenido de los vídeos, la intervención inicial de Marchena ha evitado que los testigos pudieran realizar alguna valoración al respecto, si bien el presidente del tribunal ha apuntado que todos ellos podrán ser vistos por la Sala y todas las partes durante la fase de prueba documental.
Lo único que llegó a decir el comisario antes de ser interrumpido en que en ellos "había de todo", desde resistencia "activa y pasiva" por parte de los concentrados en los centros de votación a otras grabaciones en las que no se ve que los ciudadanos hicieran nada en particular.
