VITORIA, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PP de Alava, Carmelo Barrio, denunció hoy "la obsesión permanente con la autodeterminación de los nacionalistas", y dijo que, tanto "PNV, como EA y Batasuna-ETA, lo que hacen es esconder detrás de procesos de paz el verdadero proceso, que es el de la independencia, el del soberanismo y la autodeterminación".
Asimismo, criticó que "no tenga que haber vencedores y vencidos en la política contra el terrorismo", y tras afirmar que sí debe haberlos dijo que "los terroristas tienen que ser vencidos" y que "la derrota de ETA tiene que ser una realidad, y vamos a trabajar por eso".
Barrio hizo estas declaraciones hoy en la Plaza de Correos, en Vitoria, donde el PP instaló una mesa para recoger firmad a favor de un referéndum sobre el modelo de Estado. Junto a él asistieron también a la convocatoria uno de los padres de la Constitución y miembro de la mesa del Congreso, Gabriel Cisneros; el senador alavés José Manuel Barquero; y la diputada por Alava en el Congreso, María Eugenia Martín Mendizábal, entre otros cargos 'populares'.
El secretario general del PP de Alava manifestó que "las amenazas al Estado están ahí", y que en el País Vasco "tenemos una que ha adquirido dimensiones en las últimas horas", esto es, "la obsesión permanente con la autodeterminación de los nacionalistas".
"PNV, EA, y Batasuna-ETA, en relación con el proceso de autodeterminación, quieren esconder detrás de procesos de paz el verdadero proceso que es el de la independencia, el del soberanismo y la autodeterminación", dijo.
Además, añadió que "esta obsesión amenaza permanentemente a las instituciones, a nuestra Constitución y al Estado de Derecho", por lo que animó a "seguir denunciándolo", así como el hecho de que no tenga que haber "vencedores y vencidos en la política contra el terrorismo".
"Sí tiene que haber vencedores y vencidos, los terroristas tienen que ser vencidos y la derrota de ETA tiene que ser una realidad y vamos a trabajar por eso", anunció Barrio, quien agregó que "esto forma parte de un proceso de seguir defendiendo nuestra democracia y la de la Constitución".
El líder del PP agregó además que "hay una obsesión permanente del PNV y de Ibarretxe con las mesas", por lo que preguntó al lehendakari "por qué quiere desacreditar al Parlamento vasco" y "por qué no entiende que ahí estamos representados todos y podemos hablar de todo".
En este sentido, añadió que Ibarretxe tiene un "afán de sentar a Otegi a una mesa", y dijo que PP "no entra en esos proyectos y obsesiones nacionalistas", por lo que seguirá reivindicando "el Parlamento vasco, fruto del Estatuto, donde nos reunimos todos con transparencia y no de forma oscurantista".
ESTATUTO DE CATALUÑA
Cisneros, por su parte, advirtió de que el Estatuto de Cataluña "rompe las costuras de la arquitectura constitucional, por los cuatro costados" porque "quiebra radicalmente los principios de solidaridad y de igualdad, y atenta contra valores superiores de la Constitución, como el del reconocimiento al pluralismo".
En este sentido, aseguró que la iniciativa que está desarrollando el PP es "perfectamente legítima y democrática" y "escrupulosamente ajustada a las reglas del juego".
Tras recordar que la convocatoria de referéndum es prerrogativa exclusiva del presidente del Gobierno, dijo que la formación a la que pertenece quiere recoger "un número suficientemente significativo de firmas" para "hacer llegar al ánimo del presidente la pretensión de que algo que a todos afecta, como es el Estatuto, no pueda ser decidió a espaldas de todos".
"La negociación entre Zapatero y Mas se produjo en tales términos de oscurantismo que aún hoy no sabemos cuál fue el alcance de sus acuerdos", agregó además, antes de indicar que aunque "se están produciendo algunas mejoras, entre comillas, éstas son claramente cosméticas" y "no ponen en cuestión la naturaleza misma del desafío que el Estatuto representa".
Asimismo, Cisneros reiteró que lo que el PP pretende es "defender la Constitución", que nos ha deparado "los 27 años más prósperos y felices de la historia de España". "Por muy intensa que sea la demanda nacionalista para forzar el resultado no podemos poner la Constitución en almoneda de manera alegre, frívola e irresponsable", consideró.
Por último, aseguró que "el Gobierno central debe hacer frente a esa demanda", le recordó que "quien manda es todo el pueblo español, en el que reside la soberanía", y el Estatuto es "una irresponsabilidad temeraria, sea por motivos de poder a corto plazo o por lo que sea". "Zapatero quiere reconducir la historia de España por otros caminos y remontarse a las décadas más oscuras de nuestra historia reciente", concluyó.