Fija entre sus prioridades para la igualdad acabar con la prostitución y el uso del 'burka'
SANT BOI DE LLOBREGAT (BARCELONA), 5 Nov. (EUROPA PRESS) -
El PP catalán ha realizado este sábado un alegato en favor de la conciliación de la vida familiar y laboral, para lo que ha planteado la necesidad de abordar en la reforma de la negociación colectiva una "revolución horaria".
En un acto en Sant Boi de Llobregat con todas las mujeres de la candidatura al Congreso del PP por Barcelona, Jorge Fernández y Alicia Sánchez-Camacho han erigido la conciliación como la punta de lanza de las políticas de igualdad que defiende su partido.
Por ello, han propuesto un "plan nacional de conciliación" que, entre otras medidas, promueva deducciones fiscales sobre aquellas empresas que lleven a cabo políticas que favorezcan la combinación de familia y trabajo, como la instalación de guarderías en la misma sede de la empresa, o la implantación de horarios compatibles con los hijos.
La presidenta del PP catalán ha ido más allá y ha animado a llevar a cabo una "revolución horaria" en el marco de una reforma de la negociación colectiva en que se priorice el convenio de empresa de forma que las medidas de conciliación se extiendan de forma generalizada.
Acompañado por todas las mujeres que forman parte de su candidatura, Jorge Fernández ha rechazado la política de igualdad basada en las cuotas que ha promovido el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y que "puede llegar a ser ofensiva para las mujeres".
El candidato por Barcelona ha defendido que lo que se tenga en cuenta sea la competencia de las personas y no su sexo, y ha exhibido la presencia de varias mujeres en cargos de responsabilidad del PP --varias presidentas autonómicas, la secretaria general del partido, y la portavoz en el Congreso-- como mejor ejemplo de ello.
MEDIDAS DE IGUALDAD
Camacho y Fernández han expuesto también otras políticas que afectan directamente a los derechos de la mujer y que el PP llevará a cabo si gobierna tras el 20 de noviembre: prohibir el 'burka', batallar contra la prostitución y actuar contra la violencia de género.
En el caso del 'burka', Alicia Sánchez-Camacho, ha asegurado que el PP prohibirá el uso de "esta cárcel de ropa" que atenta contra la dignidad de la mujer, y ha censurado que Zapatero no haya hecho nada al respecto pese a que prosperase en el Senado una moción sobre este aspecto que ella misma lideró.
La presidenta del PP catalán ha llamado también a batallar contra la violencia doméstica y a ampliar la protección no solo a las mujeres que la sufren, si no a los niños y ancianos que también pueden verse afectados por ella.
Preguntado sobre su postura respecto a la prostitución, Fernández ha rechazado que pueda ser regulada como un empleo, y ha abogado por acabar con una práctica "propia del siglo XVIII o XIX" e incompatible con la dignidad de las mujeres.
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