BILBAO, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
El PP ha pedido al Departamento de Interior del Gobierno vasco que "modifique su postura de tolerancia con el mundo de ETA-Batasuna" e impida el acto convocado para mañana por la asociación de apoyo a presos de ETA, Askatasuna, en homenaje a tres fallecidos en un enfrentamiento con la Guardia Civil.
En la pregunta parlamentaria presentada por Carlos Urquijo, se solicita al consejero, Javier Balza, que informe sobre si el acto organizado por esta "asociación ilegal" ha sido comunicado a la Dirección de Seguridad y, en este caso, "si se ha prohibido", ya que "los homenajes a quienes hayan participado en actos de terrorismo están tipificados como delito en el Código Penal".
Askatasuna homenajeará mañana, en plenas fiestas de la Semana Grande de San Sebastián, a los miembros de ETA fallecidos hace 15 años en el barrio de Morlans, Patxi Itziar, Jokin Leunda e Iñaki Ormaetxea, en un tiroteo que se produjo cuando la Guardia Civil iba a registrar la vivienda en la que se encontraban, dentro de una operación contra la banda terrorista. Este es uno los actos que Askatasuna ha convocado durante las fiestas donostiarras y las de las localidades guipuzcoanas de Azkoitia y Deba.
Urquijo considera que existen "motivos suficientes" para que el Gobierno vasco prohíba este homenaje y para que la Ertzaintza actúe para impedir su celebración.
En este sentido, el parlamentario del PP espera que la Consejería que dirige Balza "vele por el cumplimiento de la legalidad y evite una burla y un fraude de ley por parte de Askatasuna, a la vez que una nueva humillación y ofensa pública a las víctimas del terrorismo".
Además, insta al Gobierno vasco "a modificar su postura de tolerancia con el mundo de ETA-Batasuna" una vez que en los quince meses de la presente legislatura, la Consejería de Interior "ha permitido la celebración 35 homenajes a terroristas, casi siempre con la justificación inaceptable de que en los mismos no se habían detectado hechos de relevancia penal o administrativa".
"Los homenajes a terroristas están tipificados como delito, suelen estar convocados por organizaciones ilegalizadas y son, además, una humillación y una ofensa para las víctimas y para la mayoría de la sociedad democrática, por lo que el Gobierno vasco debe actuar en consecuencia y terminar con su postura colaboracionista", concluye Urquijo.
