MADRID, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Congreso surgido de las elecciones generales de este domingo contará, como mínimo, con nueve grupos parlamentarios, ya que estrictamente cumplen los requisitos para crearlo PP, PSOE, Ciudadanos, PNV, Podemos y las tres coaliciones de las que forma parte el partido morado: En Comú Podem (Cataluña), Es el Moment (Comunidad Valenciana) y En Marea (Galicia). Los que no reúnan las condiciones que prevén las normas de la Cámara acabarán en el Grupo Mixto.
El Reglamento del Congreso contempla dos vías para poder crear un grupo parlamentario. La más directa es obtener al menos 15 escaños en las elecciones generales, una condición que cumplen con creces PP y PSOE, que siempre han tenido grupo propio, y también los dos partidos emergentes que entran por primera vez en el hemiciclo, Podemos y Ciudadanos.
La segunda vía, donde la Mesa del Congreso tiene cierto margen de interpretación, requiere reunir al menos cinco diputados y además el 5 por ciento de los votos a nivel nacional o bien un 15 por ciento en aquellas circunscripciones en las que se presentó candidatura.
Estos requisitos los cumplen el PNV, que ha logrado seis asientos en el Congreso, uno más que hace cuatro años, y mantendrá, por tanto su propio grupo y las tres coaliciones en las que está presente el partido de Pablo Iglesias que podría así tener representantes hasta en cuatro grupos distintos.
La coalición catalana En Comú Podem (formada por Barcelona en Comú, Podemos, ICV, la federación catalana de IU y Equo), que se ha revelado como la más votada en esta comunidad y ha logrado sumar 12 escaños en su estreno electoral, y la coalición Es el Moment (que forman Compromís, Equo y Podemos en la Comunidad Valenciana) y que ha sacado 9 escaños.
También pueden tener su propio grupo con los resultados obtenidos este domingo los seis diputados que han entrado en la Cámara bajo la marca En Marea, coalición integrada por Podemos, Anova, Esquerra Unida-IU y las denominadas 'Mareas'.
IU LO INTENTARÁ
No obstante, hay que tener en cuenta que en dos de estas coaliciones (En Marea y En Comú Podem) también está presente IU-Unidad Popular, que durante la campaña ha descartado tajantemente que los diputados que pertenecen a sus siglas se sumen al grupo parlamentario de Pablo Iglesias.
De su lado, la coalición que lidera Alberto Garzón, sólo ha logrado dos escaños --ambos por Madrid-- y, en principio, estaría abocada al Grupo Mixto. No obstante, Garzón ha avanzado su intención de explorar todas las posibilidades para crear su propio grupo.
Así las cosas, podría intentar sumar a los diputados de IU elegidos en las citadas coaliciones (han logrado dos en Cataluña y uno en Galicia), aunque es complicado que con esta fórmula reúna el porcentaje de voto mínimo requerido. Otra opción podría ser recurrir a los préstamos de parlamentarios que se han practicado en otras legislaturas.
BILDU Y CC, A PRIORI EN EL MIXTO
A la espera de lo que ocurra con IU-Unidad Popular, en el Grupo Mixto podrían acabar los dos diputados que ha sacado EH Bildu (Amaiur tenía 7 en la anterior legislatura) y Ana Oramas, de Coalición Canaria, que estará una legislatura más en el Palacio de la Carrera de San Jerónimo.
De su lado, Democràcia i Llibertat (formada por Convergència Democrática, Demòcrates de Catalunya y Reagrupament), ha logrado ocho escaños (frente a los 10 que sacó Convergència en 2011) y el 15,09% de los votos en toda Cataluña. Sin embargo, en Barcelona se ha quedado con un 13,26 por ciento de los votos, es decir, por debajo del 15% que tendría que haber logrado en las cuatro provincias para tener derecho a grupo propio.
Y en una situación similar está Esquerra Republicana de Catalunya (que esta vez se presentaba en coalición con Catalunya Sí) y que, pese a triplicar sus diputados respecto a 2011 --pasa de tres a nueve-- tampoco supera el 15% de los sufragios emitidos en Barcelona, aunque sí lo hace como Democràcia i Llibertat en las otras tres circunscripciones catalanas.
Los partidos políticos contarán con cinco días hábiles desde la constitución de las Cortes Generales (13 de enero) para crear sus grupos parlamentarios en el Congreso. Esto convierte al día 19 a las ocho de la tarde en el plazo máximo para despejar un complejo mapa de grupos parlamentarios en los que, en último término, la Mesa de la Cámara será la que tenga la última palabra.
