Registra una interpelación para que explique su intención de que Ruiz Piñeiro comparezca ante la Cámara por la querella del Foro de Ermua
VITORIA, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
El PP ha registrado en el Parlamento vasco una interpelación para que el lehendakari, Juan José Ibarretxe, explique su intención de que el presidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV), Fernando Ruiz Piñeiro, comparezca ante la Cámara con motivo de la admisión a trámite de la querella contra el presidente del Gobierno autónomo por su reunión con Batasuna. El PP acusa al tripartito de ejercer un "control político" sobre la Justicia y de vulnerar la separación de poderes.
El portavoz del PP vasco, Leopoldo Barreda, explicó hoy en los pasillos de la Cámara, que el lehendakari debe rendir cuentas en sede parlamentaria por la "descalificación" a la Justicia y por la "evidente pretensión" de ejercer un "control político" sobre el TSJPV que supone la reacción del Gobierno autónomo a la admisión a trámite de la querella del Foro de Ermua.
"Es muy claro, y la reacción unánime del Consejo General del Poder Judicial así lo acredita, que no hay ningun soporte jurídico para pretender que ningún juez dé cuentas al Parlamento de su actividad jurisdiccional, de las decisiones que adopta en el ejercicio de su función", subrayó.
Para Barreda, "quien sí está sometido en todos sus actos al control del Parlamento es el lehendakari", motivo por el que debe responder ante la Cámara por la actuación de su Gobierno a raíz de la decisión del tribunal.
"CONTROL POLITICO"
Para el dirigente popular, la intención de que el presidente del TSJPV comparezca ante la Cámara "pone en cuestión la independencia del Poder Judicial" y plantea "un auténtico control político del Poder Judicial desde el Parlamento". Para Barreda, esto supone una "evidente infracción de la división de poderes y de la independencia de la Justicia".
En su opinión, la actitud del tripartito implica un regreso "a los peores tiempos del Gobierno de Ibarretxe en la pasada legislatura", caracterizados por "el enfrentamientio con la Justicia y por su descalificación" y por el intento de "enfrentar a los jueces con la sociedad vasca".
Barreda consideró que la actitud de Ibarretxe es propia de quien se siente "al margen de la ley", de alguien que "pretende no estar sometido a la ley en su actuación política". A su juicio, este modo de proceder es "estrictamente totalitario", ya que "nadie en democracia puede sentirse por encima de la ley".
