SANTIAGO DE COMPOSTELA, 5 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los grupos parlamentarios del PSdeG y del BNG rechazaron hoy la iniciativa del PPdeG para crear en la Cámara gallega una Comisión de investigación sobre las causas y las consecuencias de la ola de incendios que asoló Galicia en la primera quincena de agosto y acusaron a los populares de querer sacar "réditos políticos" con su propuesta.
El portavoz parlamentario del PPdeG, Xosé Manuel Barreiro, consideró que la comisión de estudio sobre los fuegos que se ha puesto en marcha en el Parlamento no es necesaria y calificó este órgano como "un paripé" y "una farsa a la que un grupo político responsable se puede prestar".
Asimismo, apeló a la historia de la Cámara y a intervenciones de socialistas y nacionalistas --cuando desde la oposición solicitaban comisiones de investigación--, para concluir manifestando su convicción de que los diputados de PSdeG y BNG apoyarían la comisión de investigación.
Sin embargo, los grupos que sustentan al Gobierno rechazaron la iniciativa popular por considerarla "parcial e innecesaria", en palabras del diputado socialista Xaquín Fernández Leiceaga, quien aprovechó su intervención para pedir al PP que se sume a la comisión de estudio constituida ayer "y no la boicotee".
En ese sentido, Leiceaga apuntó que apenas existen diferencias entre un órgano de estudio y otro de investigación, salvo que el primero no tiene la obligatoriedad de presentar su dictamen ante el pleno. "Vayan allí y propónganlo, no va a haber ningún problema", aseveró el parlamentario del PSdeG, que coincidió con Barreiro en la necesidad de "hacer todo lo posible para saber qué sucedió y por qué en los 12 días de agosto".
TERRORISMO FORESTAL
"Queremos ir más allá", añadió el diputado nacionalista Bieito Lobeira, que acusó al PP de querer ceñirse a la crisis incendiaria de este año y evitar los fuegos de años anteriores, cuando los populares estaban al frente de la Xunta. "Quieren inocular amnesia en el pueblo gallego para que no sea consciente de lo que hay detrás de los fuegos forestales", subrayó.
Para Lobeira, no hay duda de que existe "un terrorismo incendiario" y asoció el origen de los fuegos a la "resistencia activa de quien vivía en el status quo instalado por el PP". Asimismo, acusó a los populares de "ir a lo suyo" y estar dispuestos a sacrificar Galicia por una estrategia política que ni siquiera es suya, es de Mariano Rajoy".
El parlamentario del BNG fue muy crítico con la formación que preside Alberto Núñez Feijóo, al que acusó --junto a la cúpula del PP estatal-- de intentar apagar los fuegos con "una brigada de incendios de bonsais", en referencia a la imagen del líder popular empuñando una manguera de jardín para tratar de apagar un foco en una aldea pontevedresa.
ALCALDES
Finalmente, Lobeira reiteró que el PP usó a "algunos alcaldes, subrayo, no a todos", como arietes de su enfrentamiento con la Xunta, del mismo modo que otros regidores "llegaron a obstruir" las labores de extinción. Esta afirmación provocó la reprobación de los alcaldes del PP que se encontraban en la tribuna del Parlamento, junto al presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, y regidores de otros partidos afectados también por los incendios.
Asimismo, el portavoz popular aprovechó su turno de réplica para defender "la entrega de todos los alcaldes, de PP, PSOE y BNG", durante la ola de fuegos. Además, concluyó que socialistas y nacionalistas rechazaron la comisión de investigación "porque no quieren que se sepa lo que pasó aquí".
Según él, si se llevase adelante y hubiese que depurar responsabilidades políticas, "el presidente de la Xunta no podría cesar a quien tiene responsabilidades políticas, porque no se lo permitirían sus socios de Gobierno".
VOTACIÓN POR LLAMAMIENTO
Finalmente, Xosé Manuel Barreiro solicitó a la presidenta del Parlamento, Dolores Villarino, que se produjese una votación por llamamiento de la iniciativa del Grupo Popular, una petición poco habitual que fue aceptada tras consultar a los servicios jurídicos. El objetivo del PP, según dijo, era que cada diputado pudiese votar "en conciencia", hecho que fue calificado como "digno de un partido en franca descomposición", según el portavoz del PSdeG, Ismael Rego.
Tras este enfrentamiento dialéctico, los parlamentarios fueron votando en voz alta y por orden alfabético, rechazándose la propuesta del PP con los 38 votos en contra de socialistas y nacionalistas frente a los 37 de los populares. La anécdota la puso la vicepresidenta de la Mesa, la nacionalista Tereixa Paz, quien sobre la marcha rectificó a tiempo el voto afirmativo que estaba diciendo en voz alta, provocando las risas de los diputados de los tres grupos.