BILBAO, 29 Dic. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PSE-EE de Álava, Txarli Prieto, advirtió hoy de que "la asignatura pendiente" de la izquierda abertzale es "desligarse definitivamente de la violencia" y aseguró que, si actúa de esta forma, no tendrá dificultades para hacer política. Además, reclamó el cese de la violencia "en todos los frentes".
El dirigente socialista apostó porque se produzcan "pasos desde todas las direcciones", ya que la sociedad no entendería "darlos en una dirección sin darlos en otra", dijo en referencia a las peticiones para que el Gobierno realice gestos.
En este sentido, indicó que "no se puede cargar los movimientos sobre los demócratas", sino que "tiene que ser los no demócratas los que tienen que demostrar su voluntad de serlo", lo que "está costando muchísmo".
En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, indicó que "lógicamente querer dar pasos en una dirección sin darlos en otra cuesta mucho y es muy difícil porque la mayoría de la sociedad no lo entiende". De esta manera, advirtió de que "los gestos tienen que ser de equilibrio, de un lado y de otro, no pueden ser siempre del mismo lado".
En este sentido, destacó que el Gobierno central ha expresado "con toda claridad" su disposición al diálogo, a superar "30 años de terrorismo", a "hablar" con ETA, facilitar que "quienes hoy desde la izquierda abertzale están fuera de la democracia se incorporen a la democracia", pero con las "condiciones" de ausencia de violencia y respeto a las reglas de la democracia.
No obstante, para el dirigente socialista, "hoy todavía ni ETA ni Batasuna están suficientemente maduras para respetar estas reglas". Según afirmó, "en la medida en que esto no se respeta y sigue existiendo violencia en las calles, amenazas, proclamas que complican mucho la vida política y pública en este país es muy difícil hacer determinados gestos y determinadas posiciones".
"La democracia es un sistema lo suficientemente generoso, abierto y tolerante como para resolver muchos problemas. Pero hay que dar pasos desde todas las direcciones. No se puede solamente cargar los movimientos sobre los demócratas", insistió Prieto, para el que "los demócratas no tenemos que demostrar que somos más demócratas, los no demócratas son los que tienen que mostrar su voluntad de serlo" y, a partir de ahí, "el camino será mucho más fácil de transitar".
A su entender, "es algo que les está costando muchísimo a los que todavía hoy se resisten a ser demócratas. Y ahí están las dificultades, no están en el sistema democrático ni en el Gobierno".
De esta manera, indicó que, si bien la declaración de alto el fuego por parte de ETA es "positiva", le tiene que suceder un cese de la violencia "en todos los frentes". Así, lamentó que "ha continuado una violencia que es menor, que no es tan desgarradora como cuando se atenta contra las personas, pero que sigue generado confusión, inquietud, alarma y esto es fundamental que se resuelva".
CUESTIONA SI ES "EDIFICIANTE"
En este contexto, cuestionó si es "edificante" decir a los ciudadanos que "aquí hay unos señores que pueden seguir practicando la violencia en el nivel que quieran, que nosotros vamos a seguir haciendo cosas a su favor". "Esto no lo entendería nadie", concluyó.
En relación a la legalización de la izquierda abertzale, insistió en que, en la actual ley de Partido, todos los partidos democráticos pueden "hacer plítica" y "cualquier partido nuevo que quisiera incorporarse a la vida política, si respeta las reglas del juego, pordría hacerla".
Tras indicar que "las leyes lo que hacen es reforzar más las garantías democráticas", se preguntó "a quién le puede molestar que se le diga a un partido que no puede hacer apología del terrorismo, que tiene que hacer una política democrática desde la palabra y el respeto a los demás, a las libertades".
NO TIENE VALOR DE CONDENAR
Prieto agregó que la democracia es "un sistema de mayorias y garantías para el conjunto de los ciudadanos, y no a benefico de unos pocos" y se mostró convencido de que "el problemas es que la izquierda abertzale, quienes hicieron la declaración de Anoeta y parece que quisieron dejar de un lado la violencia y poner de otro lado la política lo hagan de verdad todavía no lo hacen".
De esta manera, lamentó que "hoy todavía la izquierda abertzale no tiene valor para condenar el terrrorismo" y que, por tanto, su "asignatura pendiente" es "desligarse definitivamente de la violencia". "A partir de ahí no creo que vayan a encontrarse grandes dificultades para hacer política en democracia", confió.
EL MISMO TRATAMIENTO
Por otro lado, el dirigente del PSE se refirió a la aprobación ayer en el Parlamento vasco de los presupuestos generales para 200, tras el acuerdo entre el Ejecutivo y los socialistas, lo que evidencia "un signo de que estamos en un nuevo ciclo de la política" en el que las relaciones entre los partidos son "mejores" y es "buena noticia para la ciudadanía".
Prieto destacó el aumento de la partida destinada a las víctimas del terrorismo, señalando que "cualquier ayuda que se haga a las víctimas siempre es poca" ya que "han sufrido el desgarro de sus seres queridos y eso no tiene ninguna compensación material". En este sentido, señaló que las ayudas que se otorgan desde las distintas instituciones a este colectivo tienen como fin "reparar o amortiguar un poco ese dolor, ese daño que se ha producido injustificadamente, pero poco más se hace".
En relación a la partida de ayudas a familiares de presos, el secretario general del PSE alavés afirmó que su partido "más que rechazar esa propuesta, lo que se ha procurado es que la política en relación con las personas que están privadas de libertad tenga un tramiento homogéneo y no se haga discriminación porque no tiene por qué tener un plus de apoyo ni de ayuda un determinado delito".
En esta línea, manifestó que "los presos por haber atentado contra las libertades y las personas son presos por haber delinquido, por haber estado fuera de la ley, exactamente igual que otros presos que lo han podido hacer contra bienes materiales" y que "curiosamente no existe una misma forma, un mismo tratamiento hacia el conjunto de las personas que puedan estar en esas circunstancias de privación de libertad y que puedan necesitar del apoyo o de la ayuda de sus propias familias".
De esta manera, destacó que el PSE desea que "el tratamiento sea homogéneo, cosa que todavía no lo es" y no cree "decente significar actitudes de privilegio o de preferencia para quien ha hecho algo tan horroroso y tan grave como es atentar contra la libertad y la vida de las personas".
De la misma manera, indicó que recordó que también "hay muchos ciudadanos que no son presos que han sido privados de sus seres queridos que también están dispersos en muchos lugares y que incluso han tenido que abandonar este país". En este sentido, señaló que "se ha producido una enorme discriminación".
"Creo que ahora se está reparando todo esto, se está intentado poner un poquito de orden, pero fundamentalmente la democracia tiene que asistir a quienes están del lado de la democracia y no tienen que mostrar privilegios a quienes han delinquido o están en contra de las libertades", agregó.
Preguntado por el acercamiento de los presos enfermos, dijo apostar por una política pentenciaria "de reinserción" y, por tanto, señaló que "todas las medidas políticas humanitarias que vayan en esa línea me parecen adecuadas". A su entender, la sociedad "tiene que tender a ser generosa constantemente en ese campo".