CARTAGENA (MURCIA), 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Cartagena presentará una moción para retirarle la Medalla de Oro del municipio al dictador Francisco Franco, ya que, a su juicio, "es incomprensible que el PP se aferre a mantener los honores y distinciones de los golpistas del 17 de julio de 1936", según informaron fuentes de esta formación política en un comunicado.
El concejal del Grupo Municipal Socialista, Francisco Martínez, recordó hoy que siendo alcalde de Cartagena Manuel López de Andujar, el Pleno Extraordinario del Ayuntamiento acordó, el 18 de mayo de 1945, crear la Medalla de Oro y ofrecer la primera a Franco como "expresión de respeto, gratitud y lealtad inquebrantable a su persona, y se le entregó en Cartagena el 7 de abril de 1957".
Martínez afirmó que la citada concesión "vulnera la Ley de la Memoria Histórica", y consideró "probable" que la entrega de la Medalla "no fuera conforme a la normativa legal vigente que requería de un Reglamento Especial de Honores y Distinciones, aprobado previamente por el Ministerio de Gobernación y del que el Ayuntamiento no dispuso hasta 1971".
Además, el concejal indicó que el artículo 28 del Reglamento actual de Honores y Distinciones "permite la revocación de la medalla concedida por condena del titular por algún hecho delictivo o por actos y manifestaciones contrarias al municipio de Cartagena".
El edil comentó que "requiere mucho tiempo y espacio resumir los hechos delictivos del general Franco desde su traición al régimen democrático legalmente constituido de la Segunda República hasta la represión del régimen que encabezó".
Asimismo, criticó que el régimen de Franco fue condenado en varias ocasiones por los organismos internacionales entre, como la Resolución 39 de la Asamblea General de la ONU y la declaración del Consejo de Europa en 2006, que condenó a la dictadura franquista argumentando que los psiquiatras militares del Régimen "efectuaron experimentos con los presos para identificar los genes rojos".
Martínez aseveró que "sólo un alcalde impuesto por el régimen podía enaltecer la inmensa labor del dictador", para lo que citó algunos datos de los actos contrarios al municipio, que calificó como "ejemplos del horror que sufrió Cartagena sólo durante el periodo 1939-1945".
En este sentido, puso como ejemplo que "11.424 cartageneros fueron sometidos a expedientes de depuración político-profesional, 4.976 fueron condenados a pena de muerte o prisión de los que 225 fueron condenados a muerte y al menos otros 49 murieron por enfermedad, malos tratos, palizas o suicidio".
El concejal recordó que el dictador "decidía la suerte de los condenados a muerte" e indicó que su mandato "no se caracterizó por su benevolencia y magnificencia con los cartageneros, sólo conmutó 40 penas de muerte por una condena inferior".
Además, dijo que varios cientos de cartageneros "se exiliaron, de los cuales al menos 30 murieron en los campos de exterminio nazi", y añadió que, con estos datos, tan escalofriantes como verdaderos, sólo una corporación no democrática "podía afirmar que recogía el sentir unánime del pueblo".
