El PSOE convocará formalmente a los portavoces parlamentarios a mediados de septiembre para negociar los PGE de 2007

MADRID, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -

El PSOE abrirá a mediados de septiembre una ronda de contactos oficial con los distintos portavoces parlamentarios para negociar el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para el 2007, las terceras cuentas públicas que el ministro de Economía, Pedro Solbes, llevará a la Cámara Baja, se informó a Europa Press en fuentes parlamentarias socialistas.

Si en el primer ejercicio el PSOE recabó el respaldo de ERC, IU-ICV, Coalición Canaria (CC-NC) y Chunta Aragonesista (CHA), el año pasado amplió sus apoyos incorporando a los nacionalistas vascos y catalanes. Sin embargo, esta vez el panorama se vislumbra más complicado a raíz del cambio de alianzas entre CiU y ERC durante la tramitación del Estatut, la coincidencia de las negociaciones con la precampaña de las elecciones catalanas y el enfriamiento de las relaciones con IU-ICV y los nacionalistas canarios.

LAS ELECCIONES CATALANAS, CLAVE

Sea como fuere, el grupo que sustenta al Gobierno es consciente de que las negociaciones presupuestarias se van a desarrollar en plena campaña electoral para los comicios catalanes del 1 de noviembre, y que, por lo tanto, el resultado de esta cita con las urnas puede tener un papel fundamental en futuras alianzas parlamentarias en Madrid.

El propio secretario general del Grupo Socialista, Julio Villarrubia, ha admitido que el proceso "en principio parece un poco más complejo" este año por la proximidad de los comicios catalanes, pues considera que "puede haber algún nivel de tacticismo" por parte de ERC y de CiU.

Hasta el momento, los socialistas se muestran optimistas e incluso ven posible sacar adelante los presupuestos sin el apoyo de ERC y CiU. Eso sí, en ese caso necesitarán atar el respaldo de IU-ICV y Coalición Canaria, además de revalidar el apoyo que el PNV prestó hace un año y que ahora podría renovar siempre que el Ejecutivo socialista garantice un acuerdo sobre el cupo vasco.

Sin embargo, IU-ICV ya ha anticipado que este año será "muy exigente" en la negociación de las cuentas generales y que reclamará un "salto cualitativo en el compromiso social presupuestario". El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares ya ha dado un toque de atención a los socialistas, a los que ha advertido de que si optan por el 'centro derecha' aliándose con CiU, habrá "consecuencias" porque no se puede "mezclar el agua y el aceite" y resultará "casi imposible" cuadrar las pretensiones de los nacionalistas con las de la coalición de izquierdas.

Paralelamente, Coalición Canaria, descontento con la gestión del Ejecutivo de la crisis de los cayucos de este verano, ya ha anunciado que reclamará más fondos en la negociación de los Presupuestos para atender la inmigración.

CAMBIOS EN EL CALENDARIO DEL CONGRESO

Por lo pronto, las elecciones catalanas que el presidente catalán, Pasqual Maragall, convocará formalmente la próxima semana pueden afectar al calendario de sesiones plenarias que aprobó la Mesa del Congreso antes del verano.

De acuerdo con dicho calendario, el debate de totalidad del proyecto de Presupuestos de 2007 se incluiría en el Pleno que se celebrará en el Congreso entre los días 24 y 26 de octubre, es decir, en plena campaña electoral. Dado que la Cámara Baja no suele celebrar sesiones plenarias durante la segunda semana de campaña, por respeto a los procesos electorales, la Mesa podría alterar la fecha del debate de las enmiendas de devolución.

En cualquier caso, el nuevo curso político parlamentario tras el verano arrancará como es habitual con la negociación de los Presupuestos Generales del Estado, el proyecto político más importante del año, tras un primer sondeo que los socialistas llevaron a cabo en julio.

El portavoz parlamentario del Grupo Socialista, Diego López Garrido, que por primera vez liderará las conversaciones tras el nombramiento de Alfredo Pérez Rubalcaba como ministro del Interior, abrirá formalmente las negociaciones dentro de dos semanas sentándose con los distintos portavoces para hablar de cifras.