Rajoy, "cómodo" en un programa en el que se le preguntó sobre su sueldo, un hipotético hijo homosexual e Irak

Actualizado: viernes, 20 abril 2007 3:35

El líder del PP sale de TVE con dos citas para explicar a dos ciudadanas las reformas estatutarias y los sueldos de funcionarios

MADRID, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -

El presidente del PP, Mariano Rajoy, aseguró sentirse "cómodo" en el programa 'Tengo una pregunta para usted, señor Rajoy', emitido esta noche en RTVE, durante el desarrollo del cual se enfrentó a 70 preguntas de 40 ciudadanos que le interpelaron, entre otras cosas, sobre su sueldo, su reacción como padre de un hipotético hijo homosexual o la guerra de Irak.

Durante la publicidad, cuando había transcurrido una hora y cuarto de programa, el líder del principal partido de la oposición dijo estar "satisfecho" con el desarrollo del mismo, según informaron a Europa Press fuentes de la cadena pública.

Rajoy, que había llegado a los estudios Buñuel de TVE a las 20.47 horas, donde fue recibido por el director general de RTVE, Luis Fernández, y el director de Informativos de TVE, Fran Llorente, se mostró muy educado en todas sus respuestas, dando repetidamente "las gracias" a sus interpelantes, a los que trató de 'usted'. Eso sí, no pudo evitar usar uno de sus habituales tacos cuando recordó a un conocido cineasta, en referencia a Pedro Almodóvar y su acusación al PP de un supuesto intento de golpe de Estado en el 14-M. "Coño, por favor, un poco de mesura", exclamó.

A las 21.30 horas, ya en directo, Beatriz, de 36 años, era la encargada de romper el hielo recriminándole su política de crispación. "Nunca antes había visto una estrategia de oposición como la del PP en los últimos tres años. ¿Cree usted señor Rajoy que la mentira reiterada y la manipulación de los hechos es políticamente rentable?", preguntó, al tiempo que recordó las declaraciones de responsables del PP vinculando a ETA con los atentados del 11-M. Además de responderle, el líder de la oposición se acercó a hablar con ella durante la publicidad.

Rajoy, vestido con un traje gris y corbata roja, se mostró relajado, sin apoyarse en el atril como hizo Zapatero durante su intervención en el anterior programa. De hecho, optó por moverse en el escenario dirigiéndose a su interlocutor, portando un bolígrafo en la mano como si fuera un profesor.

El líder del PP trató de aguantar 'el tipo' en varias ocasiones a pesar de ciertas preguntas comprometidas que le formularon los participantes. Así lo hizo tras la segunda pregunta, en la que Olga, madrileña de 24 años, le pidió hasta tres veces que definiera quienes eran los "españoles normales" a los que invitó a participar en la manifestación contra la decisión del Gobierno de conceder 'prisión atenuada' al preso etarra Iñaki de Juana Chaos y, antes de que terminara de responder, Olga le volvió a preguntar si sólo eran los heteroxesuales y católicos.

UN HIPOTETICO HIJO HOMOSEXUAL.

El tema de los matrimonios homosexuales volvió a la palestra con una pregunta de Jordi, de Tarragona, quien le planteó si se sentiría orgulloso si tuviera un hijo homosexual y si acudiría a la boda de éste. "Asistiría a la boda. Estaría incondicionalmente a su lado", le respondió Rajoy, quien no obstante reiteró que él abogaba por llamarlas "uniones de hecho".

El rechazo del PP a los matrimonios homosexuales no fue el único asunto que los ciudadanos le recriminaron. Así, varios de los participantes en el programa recordaron a Rajoy la crispación política actual, la presencia de banderas preconstitucionales en las manifestaciones convocadas o apoyadas por el partido, el Estatuto de Cataluña, los 'hilillos' del Prestige, "la corrupción urbanística que afecta a su partido" y su apoyo a la guerra de Irak.

Sobre este último punto, Rajoy protagonizó un duro intercambio de opiniones con un ciudadano que le pidió que dijera "las cosas claras" cuando el líder del PP empezó a hablar de la participación española en distintos conflictos internacionales. "Enviaron tropas a Irak sin el consentimiento de millones de españoles. ¿Lo volvería a hacer si ganara las elecciones?", le volvió a espetar el ciudadano.

Una de las preguntas estrella de la noche, como lo fue la de cuánto costaba un café en la intervención de Zapatero en el mismo espacio, fue en esta ocasión: "¿Cuanto gana usted, señor Rajoy?", que le formuló Violeta Aranguren, una jubilada con una pensión compensatoria de unos 300 euros. El líder del PP había confesado en una conversación informal con periodistas que temía que le hicieran esta pregunta y, de hecho, había barajado varias posibilidades para responderla. "Gano bastante más de la cantidad a la que hace referencia, pero yo trabajo para que todo el mundo pueda ganar lo máximo posible", le respondió finalmente.

RAJOY PARTIDARIO DE 'REPREGUNTAS'.

Los ciudadanos, muchos de los cuales llevaron sus preguntas escritas, se extendieron varias veces al formularlas, lo que llevó al conductor del programa, Lorenzo Milá, a intervenir, sobre todo al final del espacio, para pedirles que sintetizaran y no repreguntaran, como hizo Miguel Ángel, quien interpeló a Rajoy hasta en cinco ocasiones. No obstante, el líder del PP se mostró partidario de que les dejara repreguntar, algo con lo que el moderador del programa no siempre estuvo de acuerdo y, de hecho, cortó en más de una ocasión a algunos ciudadanos.

Hacia las 23.30 horas, Lorenzo Milá anunció el final del programa y cedió la palabra a varios ciudadanos más. Pepita, de Madrid, que aseguró estar muy nerviosa, tuvo que empezar varias veces a leer la pregunta sobre las pensiones de viudedad que llevaba escrita en un papel. Rajoy intentó tranquilizarla y le pidió a Milá que le dejara realizar su pregunta, que "había tiempo".

La última pregunta, cuando se cumplían ya las dos horas de programa, corrió a cargo de Asunción Bastías, una funcionaria de Alicante, quien pidió a Rajoy que le dijera cuanto gana un auxiliar administrativo. "Gana bastante más que las dos viudas que me acaban de preguntar", ironizó Rajoy, respuesta que arrancó los aplausos del público asistente.

"¿Usted hablaría conmigo de este tema?", le volvió a preguntar, a lo que Rajoy respondió: "No le quepa la menor duda". Al término del programa, ya sin cámaras de televisión, el líder del PP se acercó a Asunción para hablar con ella. Esta ciudadana le dió el número de teléfono de su casa y Rajoy se comprometió a seguir hablando con ella del bajo sueldo de los funcionarios. Rajoy también salió del programa con otra cita, un almuerzo con Rosa María Pérez para hablar sobre las diferencias entre el Estatuto andaluz y catalán.

Pese a que Rajoy había trasladado a sus colabores y periodistas que consideraba "difícil" este programa, a la 1.05 horas de la madrugada aún estaba en los estudios Buñuel relajándose y hablando con sus asesores, según fuentes de la organización del programa.