"Es aceptar la idea de ETA de que el Parlamento vasco no sirve" y el Gobierno sólo tendría el papel de esperar que la banda deje las armas
MADRID, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Fundación para la Libertad, Nicolás Redondo Terreros, expresó hoy, en declaraciones a Europa Press, la necesidad de que se reúna el Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo y de que no se acepten las dos mesas de negociación que pretende Batasuna. Sobre esta última cuestión argumentó que, si se acepta discutir la reforma del Estatuto vasco en una mesa al margen del Parlamento, se está legitimando todo lo que ha hecho ETA en estos años porque se le daría la razón cuando los terroristas afirman que el Parlamento vasco no les sirve. También avisó que en la otra mesa, la de negociación con ETA, al Gobierno, el único papel que le queda es el de esperar a que la banda deje las armas.
Redondo, quien ayer recibió a Mariano Rajoy, que dio una conferencia en la Fundación y el pasado viernes lo hizo el diputado por Madrid, Joaquín Leguina, recalcó que la Fundación para la Libertad, integrada por militantes y votantes del PSOE y del PP, apuesta por la convocatoria del Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo. Señaló la importancia de que PP y PSOE se pongan de acuerdo y superen las diferencias, ya que eso les dará "fuerza" frente al terrorismo. "La división nos empobrece", exclamó.
El presidente de la Fundación argumentó su petición de reunión del pacto en que antes que militantes, las personas son "ciudadanos" y es importante superar uno los "problemas más importantes que es el sectarismo".
Redondo dijo también que no cree en procesos de paz porque, argumentó, "o les derrotamos o nos derrotan, no hay puntos intermedios". "La exigencia de paz es importante, pero la paz que queremos es el punto de intersección entre la Ley y la Libertad", apuntó.
También manifestó su oposición a la creación de dos mesas de negociación porque, dijo, eso dejaría al Gobierno en una mesa en la que tiene que esperar a que ETA entregue las armas. "En ese proceso que dibuja Otegi el único papel que tiene el Gobierno es el de esperar a que ETA entregue las armas", precisó.
"DOS MESAS, UNA BARBARIDAD"
Con respecto a la segunda mesa, considera que supondría aceptar las tesis originales de ETA y de Batasuna, "que vienen a decir que el Parlamento vasco no sirve y está deslegitimado para lo fundamental, que es la reforma del Estatuto de autonomía". "Si se van fuera del Parlamento a decidir esto, es poner patas arriba todo el sistema democrático y no podemos aceptarlo porque estaríamos justificando lo que ha hecho ETA estos años", apuntó. "Sería una auténtica barbaridad", exclamó.
Si además, dijo, "se da la coincidencia de una profunda división entre el partido que gobierna y el que puede gobernar, el futuro puede ser caótico". En su opinión, "la paz no puede ser al precio de poner patas arriba a todo el sistema democrático", ya que sería "un gravísimo error, que espero que no se cometa".
Con relación a la reforma constitucional que plantea el Gobierno, Redondo considera que cualquier reforma constitucional que se haga, "requiere previamente un acuerdo entre el PP y el PSOE y ese acuerdo no puede ser para satisfacer a los nacionalistas, porque no se les satisface nada más que cuando consiguen sus objetivos últimos, sino para mejorar la convivencia".
Finalmente, el presidente de la Fundación para la Libertad consideró que ayer fue un día importante para la institución que preside ya que tuvieron en su foro la intervención de Mariano Rajoy, la única persona que podría ser presidente del Gobierno si Zapatero perdiese las próximas elecciones.
