Los resultados de la reconstrucción de los hechos del caso Chinchilla (Albacete) se darán a conocer en próximos días

ALBACETE, 25. (EUROPA PRESS)

Pasadas las 12.30 horas de hoy se llevó a cabo en la estación de Chinchilla (Albacete) la reconstrucción parcial de los hechos ocurridos el 3 de junio de 2003 en los instantes previos a la colisión entre el Talgo y el tren de mercancías que acabó con la vida de 19 personas y dejó heridas a casi medio centenar. En la reconstrucción no se usó tren de mercancías, tan sólo un TALGO y se espera que en los próximos días se den a conocer los resultados de esta nueva prueba.

La reconstrucción se realizó ante el juez que instruye el caso, Jaime de Lamo, agentes judiciales, técnicos, Guardia Civil, abogados así como los medios de comunicación que están siguiendo el juicio y en la misma participó finalmente el factor de circulación de la estación de Chinchilla en el momento del siniestro y único acusado del proceso, José Luis D.C.

Para realizar esta reconstrucción, solicitada por el Ministerio Fiscal, se desarrollaron tres pruebas. Previamente, en la tarde de ayer se realizó, según señaló el juez, un "ensayo general" en el propio escenario de la reconstrucción para asegurar que las pruebas saliesen bien y no se presentase ningún problema "de seguridad en la vía con nadie".

Asimismo insistió en que el Tribunal ha realizado un gran esfuerzo para que esta prueba fuese "eficaz para lo que piden las partes, que sea práctica y que no entrañe ningún tipo de riesgo para nadie".

Para cada una de las pruebas se había previsto una duración de unos 15 minutos. La prueba de sonería, una de las tres realizadas, constó a su vez de tres partes y lo que se hizo fue activar el circuito de sonería en tres posiciones diferentes del TALGO. Para seguir esta prueba el juez, junto con los abogados y medios de comunicación, se ubicó en un montículo cercano a la estación de Chinchilla.

SEGUIMIENTO.

Además una secretaria judicial y un agente de la Guardia Civil realizaron el seguimiento desde el Gabinete de Circulación de la estación de Chinchilla estableciéndose asimismo otro punto de control en el lugar sonería.

Todos ellos podían comunicarse a través de una línea de comunicación seleccionada previamente por la Guardia Civil, según explicó ante la sala el juez durante la sesión de mañana del juicio previa a la reconstrucción parcial.

Otra de las pruebas consistió en la salida del tren a máxima potencia, siguiendo la norma habitual de circulación ferroviaria, hasta alcanzar los 117 kilómetros hora para frenar posteriormente y controlar los segundos que se tarda en ese proceso.

Fue en la tercera de las pruebas en la que participó José Luis D.C. En esta prueba el factor se ubicó inicialmente en el lugar que ocupaba, según su versión, cuando el Talgo inició la marcha desde la estación de Chinchilla.

TIEMPO DE REACCIÓN.

El acusado realizó hoy el mismo recorrido que, según ha declarado a lo largo del juicio, hizo el día del siniestro desde el andén hasta alcanzar el Gabinete de Circulación ubicado en la estación ferroviaria mientras que el tren salió a la velocidad máxima tal y como habría hecho el 3 de junio de 2003.

Un secretario judicial comenzó a contar 40 segundos (tiempo éste en el que la defensa mantiene que avisó el factor al puesto de mando) mientras que otro agente que iba subido en el Talgo controlaba el lugar por donde pasaba el tren al cumplirse ese tiempo.

La cuenta prosiguió hasta 72 segundos además para establecer que punto atravesaría el tren en esos momentos. Con esta última prueba se trataba de conocer el tiempo de reacción en el puesto de mano, según fuentes judiciales.

Tras la realización de la reconstrucción parcial el abogado de la familia del maquinista del Talgo, Julio Santos, apuntó a los medios que el único que habría tenido posibilidad de avisar al conductor fue el factor a través del walkie talkie indicando que durante la realización de las pruebas de hoy quedó constatado que hay buena comunicación en ese tramo. En este sentido, recordó además que la única forma de comunicación en esta zona es mediante un walkie.

"¿Habrá que preguntarle a él porque no avisó a tiempo al maquinista para así salvar a la gente?", se preguntó el letrado, quien señaló que, al margen de la prueba de sonería realizada y lo que puedan demostrar los resultados que se extraigan, la imprudencia se produjo en el momento en el que el acusado cambió el semáforo a verde.

SONERÍA.

Por su parte, el abogado de la defensa, Julián Pérez Charcos, indicó respecto a las pruebas realizadas que con los datos que ha arrojado el Talgo pueden saber ya que tuvo que anular la sonería (circuito que al ser pisado por el mercancías habría avisado a través de un sonido de la llegada del tren).

En este sentido añadió que la sonería no se habría accionado ya que el TALGO llegó antes a un determinado punto de que el mercancías alcanzase el denominado circuito de proximidad "que es el que la podría haber accionado".

En cuanto a los datos de la frenada, solicitados por la defensa, dijo que "aún yendo a 117 kilómetros por hora el Talgo, que era la velocidad máxima y el mayor perjuicio del acusado, se ha demostrado que podría haber parado en 34 segundos".

Pérez Charcos hizo hincapié en que no obstante, si al maquinista se le hubiese avisado con anterioridad por el puesto de mando el Talgo no habría ido a los 117 kilómetros por hora, velocidad a la que colisionó, sino a unos 80 u 85 kilómetros por hora con lo cual el tiempo de frenada habría sido inferior a los 34 segundos de la prueba.

El abogado de José Luis D.C. insistió en que cuando su defendido avisó al puesto de mando, y tras las pruebas realizadas hoy en las que una de las cuestiones que se pretendía medir es el punto en el que se encontraba el Talgo cuando el acusado realizó esa llamada, la colisión aún no se había producido.