MADRID, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Rey Felipe VI ha instado este martes a los nuevos diplomáticos a ejercer su profesión con "patriotismo y sentido de Estado", siempre defendiendo "la libertad, la democracia y los Derechos Humanos, junto a la legalidad internacional" y la "apuesta decidida por un mundo en paz".
"Todos ellos son valores que inspiran nuestro ordenamiento constitucional y que vosotros, como servidores públicos, estáis comprometidos a defender y promover", ha subrayado el monarca durante el acto de la entrega de despachos de la 67ª promoción de la Carrera Diplomática.
Don Felipe ha felicitado a los 12 integrantes de la promoción "por haber escogido el honroso camino de trabajar para España a través de la Carrera Diplomática", ya que con esta decisión han "asumido con orgullo la responsabilidad de representar a nuestra patria, de servir al Estado y a los intereses de España desde los firmes valores que caracterizan a nuestra sociedad, una nación con vocación universal con una activa presencia en todo el planeta".
MUNDO GLOBALIZADO EN TRANSFORMACIÓN
El Rey les ha recordado que el contexto en el que van a desempeñar su trabajo "ha cambiado mucho en los últimos lustros y sigue cambiando", en un "mundo globalizado, en permanente transformación y con un alto grado de interrelación e interdependencia", por lo que ha destacado la necesidad de "adaptar las aptitudes y conocimientos a los diferentes escenarios", para lo cual "la mejor formación es clave".
"Hoy, en el ejercicio de nuestras funciones, debemos saber preservar los mejores principios y valores que caracterizan a nuestra sociedad: la defensa de la libertad, de la democracia y de los Derechos Humanos, junto a la legalidad internacional; la apuesta decidida por un mundo en paz; también la voluntad solidaria, que se traduce en los programas de cooperación, en la acción humanitaria en situaciones de emergencia y en las medidas que permitan un desarrollo sostenible y la defensa del medio ambiente; y, finalmente, la promoción de la cultura y el conocimiento", ha manifestado.
El monarca ha recordado a los nuevos diplomáticos que pronto asumirán sus primeros destinos y tendrán "la responsabilidad y el honor de representar a España", por lo que les ha apremiado a que ejerzan su profesión "con excelencia", pero "sobre todo con patriotismo y sentido de España que corresponde y caracteriza a los diplomáticos españoles".
"SIN PASTELEOS"
El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, también ha instado a estos 12 nuevos diplomáticos a "defender" los intereses españoles con "patriotismo" y "sin pasteleos, además de "con tenacidad, firmeza y trabajo".
El jefe de la diplomacia española ha comenzado su intervención ante el Rey y los diplomáticos señalando que "no se puede entrar, transitar o ejercer la política sin una idea clara de nuestras fronteras", más aun cuando hay que "llevar el nombre de España fuera de nuestras fronteras".
Margallo ha recordado que España es "la nación más antigua del mundo" cuya unidad se remonta al año 1474, cuando los reinos de Castilla y Aragón se unieron formando "una monarquía universal con centro en España".
"HEROÍSMO" DE LOS CATALANES EN 1808
Como prueba de esta unidad, el ministro ha citado importantes acontecimientos relacionados con la política exterior española, como la invasión francesa de principios del siglo XIX, tras lo cual ha recordado que los catalanes fueron "los primeros que, con su heroísmo, se levantaron en lo que fue la defensa de España" en 1808.
En cuanto a la política exterior desarrollada bajo su mandato, Margallo ha resumido que todo el "esfuerzo" de su ministerio ha sido "superar heridas y recuperar el consenso" perdido tras el apoyo de España a la invasión de Irak y la rápida retirada de las tropas después. "Ahora, el acuerdo con el resto de partidos, y especialmente con el PSOE, es una política de entendimiento y concordia absoluta", ha afirmado.
El ministro ha preguntado a los nuevos diplomáticos "qué se espera del servicio exterior", a lo que ha respondido que para ofrecer un "servicio a España y a todos los españoles", aunque también a las empresas que operan en el extranjero para que puedan ganar concursos y licitaciones, ya que de eso "depende el trabajo de los que quedan aquí" porque la actual tasa de paro es "absolutamente insoportable".
