MADRID, 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Senado, Javier Rojo, defendió hoy que todos los partidos políticos firmen un pacto contra la corrupción en España y apostó también por "repensar" el régimen electoral y el estatuto de las corporaciones locales, ya que el problema exige, aseguró, "la respuesta más contundente".
Rojo hizo estas propuestas en la inauguración de la jornada organizada por el Senado bajo el título 'La corrupción: un desafío mundial', y que el presidente inauguró esta mañana junto al secretario tercero de la Cámara, el senador del PP Damián Caneda.
Según Javier Rojo, el descubrimiento de los casos de corrupción se acelera porque se han puesto más medios legales, policiales y judiciales y creado mecanismos de investigación. La situación, agregó, "desprestigia la política y provoca rechazo o desafección de la ciudadanía hacia sus representantes públicos".
"¿Por qué tanta abstención? Algo tendrá que ver con algunas de las cosas que nos pasan", preguntó. "Sería conveniente un pacto de todos los partidos políticos para acabar con esta lacra porque sabemos que cuando afecta a las instituciones públicas, singularmente, a las locales, el problema es transversal, afecta a todas las formaciones", expuso.
Rojo recalcó que los corruptos "se amparan" en una siglas, "traicionan de la manera más vil la confianza en esas siglas que ha depositado la ciudadanía" y emplean su cargo público para enriquecerse. Todo ello, concluyó, obliga a "repensar" las normas del régimen electoral y el estatuto de las corporaciones locales, aunque la mayoría de ellas, dijo, "trabaja con honradez". "No podemos permitir que se extienda la sospechas", zanjó.
El presidente del Senado repasó diversos informes internacionales sobre la corrupción, también en España, pero aseguró que él se resiste "a pensar que nuestra vida cotidiana está contaminada hasta sus últimos rincones" y que los partidos políticos, las empresas o las instituciones son "fuente constante de conducta delictiva".
Y subrayó la idea de que si ahora se conocen muchos más casos de corrupción es "porque afloran" y se investiga. Apostó por reforzar los instrumentos jurídicos, pero también "el control social" contra los corruptos y contra quienes corrompen, porque el problema, dijo Rojo, es "una amenaza para la estabilidad de la sociedad, pues socava las instituciones, los valores de la democracia, la ética y la justicia y compromete el desarrollo sostenible y el Estado de Derecho".
