Considera que Zapatero no tiene ninguna credibilidad y que el PP es la "única garantía" de frenar el "desafío nacionalista" de Ibarretxe
SEVILLA, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -
La presidenta del PP en el País Vasco, María San Gil, manifestó hoy en Sevilla que la alternancia política en Andalucía es tan "fundamental" como en su comunidad autónoma porque es la "esencia de la democracia" y es bueno para los ciudadanos que se produzca el cambio.
Durante su intervención en un acto de homenaje al PP vasco organizado por el PP de Andalucía, San Gil expresó su emoción por este reconocimiento, sobre todo, porque los 'populares' andaluces y los ciudadanos de esta comunidad saben lo que es "sufrir en primera persona" la violencia y los actos terroristas.
Aprovechando su estancia en la capital andaluza, San Gil expresó su deseo de que el presidente del PP-A, Javier Arenas, sea el próximo presidente de la Junta de Andalucía porque "buena falta hace". En su opinión, en las próximas elecciones autonómicas, previstas en el primer trimestre de 2008, los andaluces tienen una "oportunidad de oro" para que la alternancia sea una realidad en su tierra, algo que es la "esencia de la democracia".
"Es fundamental que haya cambio", dijo la dirigente del PP vasco, quien indicó que tanto Andalucía como País Vasco han estado siempre "bajo las mismas siglas" políticas, el PSOE y PNV, respectivamente. Insistió en que es bueno para la sociedad que se produzca un cambio político, que además es "necesario y posible".
Para María San Gil, "nadie encarna ese cambio como lo hace Javier Arenas", quien es una "garantía de futuro". Dijo además que para que el presidente del PP, Mariano Rajoy, llegue a la Moncloa en las próximas elecciones generales es "importantísimo que Arenas llegue a la Junta de Andalucía". "Si Rajoy llega a la Moncloa, será de la mano de Arenas", sentenció.
En su opinión, las elecciones generales del próximo año son "decisivas" y apuntó que sólo el PP y Mariano Rajoy son "garantías" de que el actual "desafío nacionalista" que se vive en España no "se lleve a cabo" y consiga sus fines.
Señaló que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "no tiene ninguna credibilidad" y ya no puede hablar de España y de la unidad de la nación porque se sostiene con los "nacionalismo radicales". La Moncloa, según apuntó, necesita de un presidente que crea de verdad en la unidad de España y no caiga en los "cheques de los nacionalismos".
San Gil lamentó que Rodríguez Zapatero, durante toda la legislatura, se haya dedicado a "anteponer" los intereses del PSOE al bien de la ciudadanía.
En cuanto a la situación en el País Vasco, la dirigente popular señaló que el presidente del PP-A tiene razón cuando afirma que en esa comunidad conviven "lo mejor y lo peor". "Lo mejor es Regina Otaola (alcaldesa de la localidad guipuzcoana de Lizartza)", señaló María San Gil, para quien se trata de una persona que ha hecho algo tan elemental como es "cumplir la ley".
Otaola, según agregó San Gil, ha demostrado una "clara voluntad" de no doblegarse ante "el miedo ni de rendirse ante el chantaje de los terroristas" en su decisión de que la bandera española ondee en el Ayuntamiento de Lizartza. "La bandera es todo un símbolo y España es la garantía de derechos individuales y, por encima de todo lo demás, el derecho a la libertad", expresó San Gil, para quien Otaola "representa ese futuro y esperanza".
Respecto a lo "peor" que hay en el País Vasco, según agregó, están los terroristas y el nacionalismo radical, apuntando que el lehendakari, Juan José Ibarretxe, ha hecho un claro "desafío a la democracia" con su propuesta de independencia, con la que quiere, a su entender, que el País Vasco "rompa" con España y que los vascos se dividan entre nacionalistas y no nacionalistas, al tiempo que "da la razón a ETA 40 años después".
Mostró su preocupación por que Ibarretxe haya hecho una "hoja de ruta" para que el País Vasco deje de ser parte de España y se convierta en un territorio independiente. Ante este panorama, María San Gil recalcó que las próximas elecciones generales son "decisivas" y que el PP y Rajoy son las garantías de que "este desafío nacionalista" no se lleve a cabo.
"ENTEREZA Y VALENTÍA".
Por su parte, Javier Arenas --que entregó a San Gil en el acto una bandera de Andalucía y otra de España y una escultura del Giraldillo-- manifestó que España vive en la actualidad el "momento más crítico de los últimos 30 años, ante lo que hace falta, sobre todo, es "entereza, valentía y honestidad". Señaló que todos los españoles votantes o no del PP ven en María San Gil esas características.
Señaló que en estos tiempos de tanto "disparate" y "tan críticos" en los que se queman imágenes del Rey, no se quiere que la bandera española ondee en las instituciones, se "desafía a la Justicia", se convocan referendos ilegales, se amenaza de muerte a los políticos o se "proclama pintorescamente la III República" lo que hay que hacer es agarrarse a la Constitución Española, a la democracia y a los símbolos democráticos.
Javier Arenas insistió en que los ocho millones de andaluces que hay en España son en este momento garantía de cohesión, de igualdad y de solidaridad y no quieren que su futuro y el de sus hijos lo decidan nacionalitas como Ibarretxe y el catalán Josep Lluis Carod-Rovira. Para Arenas, lo "mejor" que hay ahora en el País Vasco es el PP y "lo peor" los terroristas, mientras indicó que en esa comunidad conviven al mismo tiempo la bondad y la maldad y la verdad y la mentira.
