IBIZA, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Sant Antoni prevé aplicar una ley similar a la nueva Norma que entró ayer en vigor en Barcelona para Fomentar y Garantizar la Convivencia Ciudadana, por la que se podría sancionar a las personas que alteren el orden público, ejerzan la prostitución en las calles de Sant Antoni o busquen sus servicios. Una norma que ya ha sido ampliamente criticada por algunos colectivos afectados en la Ciudad Condal donde las prostitutas continuaron ayer desbordando las aceras de la calle de Sant Ramón.
Tal y como destacó ayer la concejal de Participación Ciudadana de Barcelona, Assumpta Escarp, "se ha decidido dar un tiempo para la disuasión y la información". De hecho, para su correcta aplicación, el Ayuntamiento de la capital catalana se dispone a movilizar "a un verdadero ejército de vigilantes que tutelará el cumplimiento de las normas, así como una unidad administrativa con la misión de instruir expedientes, resolver recursos y cobrar las multas en el mínimo tiempo posible".
Para emular esta dotación de efectivos el concejal de Gobernación de Sant Antoni, Joan Pantaleoni, afirmó que el municipio dispondrá de un aumento de entre el 10 y el 15 por ciento de efectivos policiales a partir de verano "que se sumarán a la policía turística anual, acumulando además el aumento del 30 por ciento de la plantilla en estos últimos años".
Pantaleoni consideró que esta dotación de policías "puede ser suficiente, a pesar de la escasez de recursos que tiene la localidad". Unos agentes "que trabajarán especialmente en las prioridades de lucha contra el ruido y la prostitución", confirmó.
El concejal de Gobernación del Ayuntamiento del municipio pitiuso aseguró a Europa Press que aún está trabajando en esta normativa ya que desconoce cómo se acometerán las sanciones. Pantaleoni añadió que lo que sí se prevé es que las personas que reincidan "puedan ser denunciadas por desacato a la autoridad y que estas sanciones se tramiten por vía penal".
El edil apuntaba también que "esta será un arma disuasoria que ayudará a erradicar este tipo de situaciones en el municipio". En esta nueva ordenanza, el Ayuntamiento de Sant Antoni se compromete, a través de los servicios sociales competentes, "a prestar información y ayuda a todas aquellas personas que ejerzan el trabajo sexual en la ciudad y quieran abandonar su ejercicio".
