Sanz afirma que el 80% de los navarros no quieren cambios en el estatus de la Comunidad Foral

PAMPLONA, 3 May. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Navarra, Miguel Sanz, sigue acaparando protagonismo en el proceso abierto por la tregua de ETA. Insistió en que es necesario blindar a Navarra, se mostró convencido de que el 80 por ciento de los navarros no quiere cambios en el estatus de la Comunidad Foral y aseguró que estaría dispuesto incluso a dejar su cargo si consigue garantizar que no se modificará la situación de la Comunidad Foral. Para el PSOE navarro, la postura de Sanz ofrece "dudas razonables" sobre su deseo de paz. El PNV achaca a Sanz motivos partidistas y un adelanto de un año de la campaña electoral.

Sanz, en una entrevista concedida a Herri Irratia, aseguró que es necesario "blindar Navarra". Esto significa "no aceptar, bajo ningún concepto, que Navarra pueda modificar su estatus político institucional, reflejado en el amejoramiento, al margen de la voluntad de los navarros". En este sentido, aseguró que no tiene ningún miedo a un hipotético referéndum, convencido de que el 80 por ciento de los navarros apostaría por seguir en las mismas condiciones actuales.

El presidente navarro aseguró que no "dudaría en dejar de ser presidente de Navarra si somos capaces de alcanzar un acuerdo que permita blindar el régimen foral de la Comunidad de Navarra". En este sentido, su apuesta por la desaparición de la disposición transitoria cuarta de la Constitución. "No es lógico ni razonable que la Comunidad más histórica de España tenga todavía una disposición transitoria que permite no establecer de forma definitiva cuál es el status político e institucional de Navarra", explicó.

Según explicó, tiene "referencias" de que Navarra es "objetivo fundamental" de ETA y se mostró convencido de que "no va a renunciar" a él. Sanz criticó tanto al PSE, por no ser "en ningún caso claro y transparente con los ciudadanos navarros". Y al Gobierno le reprochó que no haya calificado el ataque de Barañain como un atentado terrorista. Dijo que se fía de la labor del Ministerio del Interior, pero también reivindicó su derecho a discrepar de "actitudes, planteamientos o declaraciones".

"INCAPACITADO PARA DIRIGIR NAVARRA"

Las últimas actuaciones y manifestaciones de Sanz no han sentado bien en las filas socialistas. Carlos Chivite, secretario general del PSOE navarro, aseguró que el presidente foral "cada día se supera a sí mismo". "Está en un proceso de incapacitación progresiva para dirigir por más tiempo los destinos de esta comunidad", añadió.

Chivite proclamó que Navarra seguirá teniendo un status propio y diferenciado. "Lo construimos los socialistas, lo mantenemos y lo impulsaremos", dijo. Y dado que Sanz ha rechazo una reunión con el PSOE para hablar de la tregua de ETA, Chivite dijo que mantiene "dudas razonables" sobre los deseos de paz del presidente navarro.

El presidente del PNV navarro, José Ángel Agirrebengoa, aseguró que Sanz ha adelantado en un año la comunidad foral y permanece en "una situación de nerviosismo" porque ve que, ante el alto el fuego de ETA, "se le acaba el chollo" de identificar el terrorismo con el nacionalismo y peligra su futuro en el Gobierno navarro. Para el coordinador de Aralar, Patxi Zabaleta, "en democracia no se puede blindar nada porque por encima está la voluntad popular".